El exduque de Palma Iñaki Urdangarin ha ingresado esta mañana voluntariamente a la cárcel de Brieva, en Ávila. Se trata de un centro penitenciado para mujeres presas, pero no es la primera vez que un hombre reside entre sus cuatro paredes. El exdirector de la Guardia Civil, Luís Roldán, también pasó alló parte de sus 30 años de condena.
La prisión en cuestión cuenta con 162 celdas. En la actualidad se encuentra al 60% aproximadamente de su capacidad y está clasificada como cárcel para presas ordinarias pese haber tenido también reclusas de primer grado condenadas por terrorismo. Según informa la Cadena Ser, recientemente el Ministerio del Interior se gastó más de 1 millón de euros en reparar el sistema de calefacción.
Aislada y con comodidades
El centro penitenciario se halla a siete kilómetros de la capital, lo que facilitaría la llegada de su esposa, la infanta Cristina, si reside en Madrid o bien coje el avión de Suiza --donde reside actualmente-- a Madrid.
El módulo en el que residirá Urdangarin se mantiene prácticamente intacto desde su construcción. En el mismo módulo estuvo Roldán durante sus primeros diez años de condena, y han pasado algunos presos varones que estaban colaborando con una causa judicial.
El exduque de Palma tendrá poca relación con el resto de reclusas, ya que solo accederá a su módulo de forma diaria el funcionario encargado de traerle la comida.
'Vis a vis' mensual
Todas las reclusas tienen derecho a tener un vis a vis mensual. La más solicitada de las opciones del régimen de visitas suele ser el vis a vis íntimo. Las condiciones aisladas del centro permite que puedan estar varias horas sin ser escuchados y tener un poco más de intimidad que en las cárceles habituales.
Asimismo, el espacio está diseñado para albergar mujeres, con actividades y talleres pensados para reclusas.