Un total de 1.364 firmas contra el nuevo dispensario de metadona de El Masnou (Barcelona). Vecinos y comerciantes de la localidad han recogido los apoyos en apenas quince días. Piden reubicar el servicio de adicciones -- llamado Centro de Atención y Seguimiento (CAS)-- del CAP Ocata, sustituirlo por una segunda consulta de pediatría en el municipio y equipar el ambulatorio con un aparato de radiodiagnosis.

Según han explicado residentes a este medio, "ha sido difícil recoger las firmas, pues empezamos a pedirlas el pasado 12 de febrero, cuando trascendió que el dispositivo sanitario incorporaría la unidad médica". Las 109 hojas son la respuesta a una propuesta del alcalde, Jaume Oliveras (ERC), de mantener una reunión con los propietarios de negocios y vecinos del lugar.

Sin consenso de CTM

Cabe destacar que el Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) planificó el servicio por su cuenta, sin contar con el concurso de Comunitats Terapèutiques del Maresme (CTM), el principal proveedor de servicios de salud mental de la zona. El presidente del ente, Valentí Agustí, ha confirmado a este medio que "se les informó del proyecto en una reunión, pero la gestión recaerá en el Consorcio de Salud del Maresme (CSM)",

"Un equipamiento de este tipo siempre es problemático. Entendemos que se trata de un drenaje de la unidad similar que opera el Hospital de Mataró (Barcelona) para ofrecer una atención más cercana a los pacientes de la zona", ha agregado el facultativo.

Polémico

Además de evitar el concurso de CTM, el CatSalut tampoco informó "con rigor" a los vecinos, según indican ellos mismos. Admiten que el ayuntamiento celebró una reunión a puerta cerrada el pasado 18 de diciembre y que informó de la ampliación de la cartera de salud mental en el CAP en el boletín municipal. No obstante, afean a Oliveras que escondiera el hecho de que el área médica compartiría espacio con la psiquiatría infanto-juvenil y que se dispensaría metadona.

A raíz de este descontento se ha creado la plataforma Pediatría sí, metadona no, que pide ampliar la dotación pediátrica en el ambulatorio y trasladar la oficina de drogodependencias a otro lugar más "idóneo".