Tres vigilantes de seguridad resultaron heridos tras una brutal paliza en el Metro de Barcelona el domingo pasado. Hasta diez personas y el trío de agentes, dos de ellos de servicio y uno de paisano, se enzarzaron a bordo de un vagón de la línea 5 del suburbano de madrugada, según ha confirmado Transports Metropolitans de Barcelona (TMB).
Fuentes conocedoras de los hechos han indicado que la agresión a los agentes uniformados de Securitas fue de extrema violencia. "Se abalanzaron sobre ellos y los patearon", han indicado las voces consultadas.
"Eran un grupo que procedía de una de las discotecas cercanas al Hospital Clínic. Salían calentitos y empezaron a comportarse como gamberros. Cuando los dos vigilantes les reprendieron su actitud, empezaron a golpearles brutalmente. A uno llegaron a patearle", han agregado.
"Ninguno está grave"
Los Mossos d'Esquadra han confirmado a Crónica Global que les consta el incidente, que han abierto diligencias y que están buscando a los supuestos autores de la trifulca.
Por su parte, TMB ha querido dejar claro que "ninguno de los vigilantes resultó herido grave". Según la empresa de transporte público de la Ciudad Condal, los hechos ocurrieron pasadas las 6:15 de la madrugada a bordo de un vagón.
"Tras un aviso de que en un tren de la línea 5 había un grupo de seis o siete pasajeros con comportamientos incívicos, dos vigilantes de seguridad subieron al vagón en la estación de Sants. Trataron de que los vándalos depusieran su actitud. Estos, no obstante, continuaron con su actitud hostil y respondieron a la llamada a la calma de los empleados con agresiones".
Fuga a pie
Según las fuentes consultadas y TMB, el grupo de agresores también la emprendió con un tercer pasajero que intentó interceder en la riña. Se trataba de un agente de seguridad de Prosegur que no estaba de servicio. Después, el grupo se dio a la fuga en el apeadero de Gavarra.
Según Transports, dos de los afectados fueron atendidos por el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) en Cornellà. La pareja presentaría contusiones y hematomas. El tercer vigilante que trató de mediar en la pelea tuvo que ser trasladado al Hospital Moisès Broggi de Sant Joan Despí (Barcelona), donde le sanaron heridas en el rostro y la cabeza.
La empresa ha subrayado que "está colaborando con la investigación" que han iniciado los Mossos, ya que las tres víctimas han interpuesto denuncia ante el cuerpo de policía autonómico.