Viajar sin maletas
El envío de equipaje al destino de vacaciones es, en general, más caro que facturarlas en avión pero evita transportarlo y tiene más garantía de no perderse
4 julio, 2017 00:00Algunas empresas hacen el agosto, literalmente, en verano. Es el caso de las especializadas en el transporte de equipaje, que en la época vacacional es cuando tienen más demanda. Es un servicio puerta a puerta, en general más caro que la facturación en avión pero con ventajas como evitar el transporte, colas y con menos posibilidades de pérdida.
Viajar y encontrarse las maletas al llegar al hotel es la filosofía de estas compañías, cada vez más en España. Es a través de mensajero y la mayoría ofrecen servicio tanto nacional como internacional. No sólo transportan maletas, también bicicletas, palos de golf, esquís y cualquier otro tipo de equipaje. Su máxima es la comodidad.
Precios más altos sin sorpresas
La primera empresa que se dedicó a ello en España fue Sin Maletas, que se creó en 2008. Su responsable de comunicación, Albert Solà, destaca las ventajas del servicio: “No tener que desplazarse y transportar las maletas si se viaja cargado y evitar las colas de facturación en los aeropuertos son las dos principales”. Pero, ¿sale a cuenta económicamente?
Las tarifas dependen de la distancia, de si hay que pasar por aduanas y del tamaño y el peso del equipaje. Según la página web de Tuequipaje, enviar una maleta de 20 kilos --el estándar que permiten los aviones-- entre la península y Baleares cuesta unos 67 euros. En Sin Maletas, pueden cobrarte unos 105 euros. Las compañías aéreas low cost en las que hay que abonar un extra para facturar maletas, los precios suelen ser de entre 20 y 30 euros adicionales.
Viajeros hacen cola en los mostradores de facturación de una aerolínea / EFE
Sin embargo, “no hay costes adicionales”, afirma Ekaitz Barrenetxea, responsable de marketing de Seur. Mientras que las aerolíneas hacen negocio con el sobrepeso de las maletas y cobran el kilo extra a precio de oro, las compañías que se dedican al transporte de maletas no suelen presentar sobrecargos y el cliente se evita las sorpresas. “No nos centramos tanto en el precio como en la atención personalizada que recibe el cliente”, asegura Maya Pérez, fundadora de Tuequipaje.
Aduanas y pérdidas
El tiempo que tardan en transportar las maletas suele ser de 24 horas en territorio peninsular, que puede duplicarse para mandar equipaje a las islas. En la UE, el tiempo medio está entre dos y cuatro días, mientras que en Estados Unidos, por ejemplo, puede llegar a tardar una semana. Es por esta razón que todas las empresas recomiendan realizar el envío con antelación para que el cliente se encuentre las maletas en el destino.
Las aduanas son uno de los factores que influyen en este aspecto. Los pasos fronterizos también impiden, a veces, hacer envíos a países concretos. “En la UE hay libre circulación, aunque algunos países ponen problemas para hacer envíos de efectos personales sin acompañamiento y sólo se pueden realizar como un intercambio comercial, por lo que el precio sube y es más complicado”, indica Solà.
Perder las maletas también es más difícil con estos servicios que si las mismas compañías aéreas se ocupan de transportarlas. “En seis años, hemos perdido dos maletas y fue porque el cliente no pudo imprimirse las etiquetas con las que funcionamos”, indica Pérez.
Imserso, Erasmus y mudanzas
Es en los periodos vacacionales donde se concentra la mayor parte del trabajo para estas empresas. Grandes compañías de envíos, como Seur, también se han apuntado a la moda. Hace cinco años que sacaron su servicio encarado al transporte de maletas, y solo lo ofrecen en verano. “Este ha sido el primer año en el que también hemos hecho encargos en Semana Santa y nos planteamos añadir Navidades”, explica Barrenetxea.
Varios jubilados transportan maletas en el aeropuerto de Barajas / EFE
El perfil de clientes es variado, aunque hay uno que se impone. “Los viajes del Imserso son una gran fuente de clientes y, además, son muy fieles”, coinciden desde Tuequipaje y Sin Maletas. La dificultad de las personas mayores para transportar pesos las empuja a hacer uso del servicio.
En la otra parte del espectro se encuentran los estudiantes Erasmus, también habituales de este tipo de compañías por tener que transportar grandes volúmenes de objetos personales. Entre los servicios de este tipo de compañías también se encuentran las mudanzas y, cada vez más, el transporte de equipajes sólo hasta el aeropuerto.