Los Testigos de Jehová pidieron ocultar un agujero empresarial de un millón de euros en una firma de suministros del norte de España. El culto apeló a la "paz" de la congregación para presionar a los copropietarios de la firma y evitar que denunciaran el caso ante la justicia ordinaria.
El caso afecta a una conocida empresa de suministros para la construcción con sede en una gran ciudad septentrional. La compañía, fundada en 1975, pertenece a una familia que es miembro de los Testigos desde que nació.
Al morir uno de los progenitores en 2014, una de las hijas heredó una participación en la sociedad. El resto del capital siguió en manos de sus allegados.
"Un millón de euros"
Cuando la ciudadana recibió la herencia accionarial, descubrió un pufo notable en la mercantil en lo que parecía una empresa solvente, según se desprende de los documentos a los que ha podido acceder este diario.
A tenor de lo que narran los papeles que obran en manos de varias congregaciones de Testigos en la zona norteña, la socia habría descubierto la venta sospechosa de una nave industrial y desvío de fondos.
Asimismo, afloró la creación de una empresa muy similar con nombre parecido, un portal web redirigido y un teléfono idéntico. Con esta estratagema, la mercantil paralela se habría llevado el fondo de comercio, la mercancía y la clientela.
La denunciante calcula que el menoscabo causado por la presunta administración desleal totaliza un millón de euros, 400.000 euros en fondos desviados y 600.000 en mercancías trasladadas a la sociedad B.
Los Testigos sugieren callar
Al ser Testigo de Jehová de nacimiento, la vecina acudió a la justicia interna del culto milenarista. Su primera denuncia de 2014, a la que ha podido acceder este diario, sugería que sus socios habían cometido fraude, competencia desleal y administración irregular.
La respuesta de la sede central de la denominación en Ajalvir (Madrid) fue muy clara. "Queremos animaros a aplicar los principios bíblicos en todas vuestras decisiones y a no dejaros llevar por las emociones", reza la misiva.
Segunda denuncia
No contentos con la contestación, los afectados dieron un paso más. Enviaron un burofax al cuartel general de los Testigos en el que insistían sobre los indicios de fraude. Además, pidieron la creación de un comité interno para investigar lo sucedido.
De nuevo, la cúpula del culto respondió (carta adjunta) emplazando a la familia a evitar la justicia ordinaria. "¿Es más importante para nosotros el dinero y los derechos, o la paz y unidad familiar de la congregación?", se pregunta un pasaje de la carta de respuesta.
"Estamos seguros --continúa la misiva-- de que como cristianos que deseáis hacer las cosas a la manera de Jehová os esforzaréis por seguir éstos y otros consejos".
Presiones
En el resto de la documentación, los afectados hacen hincapié en las presiones recibidas.
Según se lee en la documentación, la empresaria afea al circuito de administración de justicia interno de la denominación que haya sido implacable con ella pese a que habría entregado dinero a la sociedad familiar cuando lo necesitó.
Según se desprende de la última comunicación con Ajalvir, la ciudadana se ha dirigido ahora al departamento jurídico de los Testigos en la sede central mundial en EEUU para tratar de reabrir la investigación.