Una juez anula una hipoteca que BBVA firmó con un anciano terminal
Condena al banco, que no informó debidamente al cliente, a devolver al hijo más de 650.000 euros por gastos, primas y pérdida patrimonial
19 diciembre, 2016 14:11Un juzgado de Madrid ha declarado nula una hipoteca inversa que BBVA colocó a un anciano enfermo en fase terminal al que no informó de los riesgos que asumía. Así, ha condenado a la entidad a devolver a su heredero más de 650.000 euros por gastos de cancelación, primas y pérdida patrimonial del piso por el que se suscribió la hipoteca.
Las hipotecas inversas están pensadas para personas mayores de 65 años, y consisten en que el banco paga una cantidad mensual vitalicia al cliente a cambio de que éste utilice la vivienda como garantía. La renta depende del valor del inmueble y de la edad del residente, por lo que a más valor y más edad, mayor renta.
Cáncer en fase terminal
En este caso, el cliente tenía 85 años, era viudo, jubilado y enfermo de cáncer de pulmón en fase terminal. Por otra parte, su situación económica era holgada: tenía una vivienda, una pensión y complementos que le reportaban 2.493 euros al mes, y dos pagas extra de más de 2.000 euros, además de cuentas y activos por valor 230.000 euros.
En enero de 2013 firmó una hipoteca inversa sobre la vivienda que poseía en el barrio de Salamanca de Madrid, valorada en más de un millón de euros. Según el contrato, recibiría mensualmente una renta de 4.647 euros hasta el año 2020.
La operación fue asesorada por una empresa independiente de BBVA llamada Óptima Previsión, que percibió una comisión de más de 6.000 euros por sus gestiones. En total, el coste de la operación supuso para el cliente un importe de 229.354 euros.
Falta de información
El cliente falleció el 4 de noviembre de 2013, antes de que se cumpliera el año de la firma de la hipoteca. Al aceptar la herencia, su único hijo se encontró con que la vivienda tenía una carga de más de 300.000 euros, a pesar de que las disposiciones de su padre no llegaban a 45.000 euros. El importe, además, se incrementaba con los intereses, por lo que tuvo que malvender la vivienda para poder liquidar la deuda con el banco.
Tras estudiar el caso, el tribunal ha decidido anular la hipoteca y obligar al banco a pagar más de 650.000 euros al demandante al entender que no se informó lo suficiente al anciano de los riesgos que implicaba la firma de la hipoteca inversa. La sentencia recuerda que este tipo de hipoteca está pensada para gente que necesita dinero y que debe tenerse en cuenta la esperanza de vida.