Todos contra el club erótico de moda de la zona alta de Barcelona

Todos contra el club erótico de moda de la zona alta de Barcelona. Vecinos del exclusivo barrio de Turó Park de Barcelona han movilizado a la Guardia Urbana y a los Mossos d'Esquadra contra el Bacarrá, el local de ocio para adultos situado en la calle Borí i Fontestà. Los residentes exploran una doble vía paralela: preparan una denuncia por supuesta prostitución en la barra americana y, a la vez, han concitado la complicidad de los cuerpos de policía local y autonómica.

"La semana pasada hubo varias reuniones. Por un lado, se exploró la posición del distrito. Por el otro, hubo reuniones con los Mossos d'Esquadra sobre la materia. La vía que exploraremos para cerrar el local será comprobar si su actividad se ajusta a la licencia", explican residentes de la zona.

Interviene un arquitecto

Dicho y hecho. Los residentes de la zona, hartos de "ruidos, gritos y un trajín de ir y venir de coches con prostitutas y sus clientes", han tirado de chequera. Han fichado a un arquitecto, que ha redactado un escrito desnudando al club. El documento repasa la historia del local desde la concesión de la licencia de actividad de 1989 (imagen inferior) hasta la actualidad.

La conclusión de los vecinos es tajante: sostienen que en el Bacarrá se ejerce la prostitución. "Y ello tras más de 200 llamadas y quejas formales a la Guardia Urbana y sede del distrito", recuerdan desde la Asociación de Vecinos de Turó Park.

Todo en regla

La posición del Ayuntamiento de Barcelona es más comedida. El consistorio recuerda que el espacio dispone de licencia de actividad. "No constan quejas formales de vecinos. El local tampoco tiene ningún expediente en regla por ruidos", ha indicado una portavoz municipal.

No obstante, Crónica Global ha podido acceder a una carta enviada por la Unidad Nocturna de la Guardia Urbana a los vecinos. En la misiva, el cuerpo local de seguridad admite "incumplimientos" de ordenanzas en el local tras realizar varias inspecciones a lo largo de 2016.

Los agentes reconocen como mínimo vulneraciones del horario de cierre.

Redada

El resto de policías también actúan. Agentes de Extranjería de la Policía Nacional peinaron el Bacarrá y otro club adyacente el pasado 7 de octubre de madrugada (imagen inferior).

Redada en el club de striptease Bacarrá de Barcelona / CG

"La inspección fue de carácter rutinario. Es de las que se hacen cada tres o seis meses, para verificar si las chicas que hay en el local tienen papeles. Apenas producen resultados", explican fuentes del sector.

Aliados poderosos

Los exiguos resultados pueden tener que ver con el club cumpliendo a rajatabla su licencia. O bien, como sostienen los residentes, con los contactos "poderosos" de los dos empresarios que comandan el local.

La empresa que gestiona el establecimiento es Iniciativas Movilex SL. La mercantil heredó la licencia de actividad de la sociedad anónima Ciruela SA en 1999 (imagen inferior).

Al frente de Iniciativas Movilex está Marta Ribas, la exdirectora de relaciones públicas de la firma de cátering Semon. En el pasado y cuando heredó la licencia de sala de fiesta, la sociedad declaraba como administrador al famoso subastero Celestino Lamas Bolaño. El dueño de la casa de sellos y monedas homónima se desvinculó del negocio en 2003.

Planes de expansión

Quizá por ello, la presión vecinal y policial ha producido pocos resultados. La boite de noche continúa operando con el cebo publicitario de "barra americana con 60 bellezas que iluminarán tu noche".

Los vecinos de la zona explican otra historia. "No puede ser que haya chicas esperando en la calle. O que algún vecino se queje del ruido de madrugada y le apedreen la ventana, como ocurrió hace tres semanas", lamentan.

Mientras, el resto del sector del ocio para adultos se mantiene al margen. "Jaime Veiga y su socio son la Champions. Nadie les tose, hacen lo que quieren. Ahora tiene planes para expandirse a otros sectores. La fórmula de operar como sala de fiestas les funciona".