Concurso de ortos en el Cuore: 28 traseros, 28, a examen

Diez horas le ha costado a Jesús José volver en sí tras el repaso a la prensa del corazón. La sobredosis de Paula Echevarría ha sido tan y tan brutal que J. J. está por hacerse suscriptor de Telva y no leer nada más. Cuenta y no para sobre el subidón que experimentó con la portada del Cuore, un campeonato internacional de ortos, 28 bundas, traseros, panderos o mayormente culos a examen. Y Paula Echevarría, la mejor, seguida a escasa distancia de Sara Carbonero. Menos mal que le dan un palo a Cristina Pedroche, de la que exhiben una fotografía que podría ser materia penal.

Aquí se le llama chorizo a un padre de la patria y no pasa nada. Ahora bien, se sugiere una crisis de pareja entre Paula "another time" Echevarría y David Bustamente y, como no sea cierto, se le puede caer el peluquín hasta a Jorge Javier Vázquez. De ahí que el periodismo se vivifique en las páginas satinadas de lo que viene siendo conocido como la prensa del corazón.

A J. J. lo encontró el Samur inconsciente, en calzoncillos y en un lamentable estado de priapismo incontenible, rodeado de papel couché. Una escena dantesca. De tan perjudicado que estaba se le administró una dosis de "!Qué Me Dices¡" para sofocar la presión arterial. Belén Esteban en Benidorm, ahí es nada. Consiguieron retornar a la consciencia a Jesús José, ya saben J. J., que ha prometido dejar el marujeo por una temporada. Es lo que dice siempre, que última vez que bebe pisco sour.

Esta semana la información es del nivel de que es la primera vez en 19 años que Melanie y Banderas celebran sus cumpleaños por separado. El actor está supervisando las obras de su ático en Málaga y medita cambiar Los Ángeles por un loft en la Quinta Avenida. Se le ha visto en compañía de su hermano de bar en bar y se trajo al elenco de "Los Mercenarios, parte five", que posaron en un "photo-call" en Marbella. Rollo Van Damme (no confundir con la cerveza). Nuestro galán no se relaciona con Jack Nicholson precisamente.

En el mismo plano internacional, a Penélope Cruz le han concedido el título de "tonta de la semana" en la Fox. Tiene mucho mérito. En cambio, de su marido, Javier Bardem, no dicen nada y eso que figura en la misma lista de firmantes en contra de Israel que Pé, un centenar de artistas españoles. No es mala publicidad para la Cruz, que podría optar a muchos papeles de villana. J. J. dice que todo eso es lo de menos y que sigue sin entender a quién le importa lo que digan cien titiriteros (es tan de derechas que lleva el jersey de pico sobre los hombros) sobre política internacional.

El espectáculo de Cuore, el concurso de culos, es una versión depurada de las fiestas de camisetas mojadas. La fórmula funciona, tetas y culos. Y si funciona, ¿para qué pensar? En ese nivel, el último desengaño amoroso de Rosa de España o el romance crepuscular entre María Teresa Campos y Bigote Arrocet (sí, lo que leen) son caviar de trucha frente al tradicional paté de mejillón. Es tendencia la sal de frutas. Han pasado muchas más cosas en el semisotano de la jet, pero todo acaba en Paula Echevarría.

Costumbres locales. Seguimos en Formentera y hacemos la compra en Ibiza, a donde llegamos en moto acuática. Cuando nos aburrimos leemos periódicos, comentamos revistas y echamos pan a los patos, que es cuando mejores ratos pasamos. Por las noches jugamos a trago o canción y proponemos cosas así.

No matamos el tiempo, lo masacramos. El Hola es lo mejor. Esta semana nos enseña la casa de "estilo ibicenco" de Ricardo Urgell, al que bautizan como el rey de la noche. Se ve que es el dueño de Pachá. El "estilo" no es precisamente el de su antepasado más ilustre, Modest Urgell, celebrado pintor de calendarios. Arte local y disgresión. De Urgell a Tàpies. ¿A ver cuándo se decide la municipalidad a retirar la chatarra del museo (así lo llaman) de Tàpies en la calle Aragón?. Seguramente se limpiará la azotea el día que los ciclistas cumplan las más elementales normas de urbanidad. O sea, nunca. Lo cual quiere decir que esa cosa, llamada "núvols i cadira", los hierros oxidados que comprometen la estructura del edificio, se consideran una obra de arte en Cataluña, al igual que los lienzos con material orgánico que engalanan inevitablemente las casas de la alta burguesía. El color es un indicio de la clase de material orgánico que podía utilizar el genio, en la línea de la tradición escatológica, del residuo a la fertilidad, de las piedras, panes y del cerdo, hasta los andares. La cotización de Tàpies, pese a todo, sube, aunque ya sólo son fiables los dibujos. Los óleos tienden a degradarse. Es un asunto muy desagradable.

Los Pujol no salen en la prensa rosa. Ni Tàpies ni Modest Urgell, no se asusten. El Urgell del Pachá no es pintor, sino hostelero, lo que denota hasta dónde ha prosperado el linaje. Sin embargo, que el alcalde Xavier Trias, como los anteriores, mantenga la cosa esa de Tàpies en el techo de la también llamada "fundación" y no deje construir sobreáticos en los palomares puede ayudar a entender por qué todo el mundo lo sabía y nadie decía nada.

Reencuentros. Telma Ortiz y Jaime del Burgo, juntos en una boda. Pastora Vega y Juan Ribó también se han dado una segunda oportunidad. En Barcelona, por cierto, se ha rodado "Anacleto, agente secreto". Imanol Arias lo ha bordado. Tan simpático..., se pasaba las noches en el local de Javier Planas (de los Planas que trabajan, no de los de Logroño) en los "Jardinets de Gràcia". Es un sitio "must" de un trato magnífico. Aún no lo han visitado los "cinc a taula", de modo que no se ha jodido ni la comida ni el ambiente. Tras las copas, sería ideal poder mojar los pies en el abrevadero colindante, escultura de Frederic Amat, pero, claro, con Trias se han agostado hasta las fuentes de Montjuïc. Esto es, que esa zanja (abrevadero o ataúd) en Cataluña es una escultura. Y los Pujol, gente honrada.

Los reencuentros son un paso imprescindible para los desencuentros. Septiembre es el mes del año con más separaciones y divorcios. Las vacaciones son letales para las relaciones humanas.

La semana que viene hablaremos de los restaurantes que ha cerrado Chicote y, por extenso, de las "recomendaciones" de esa sociedad gastronómica cuyo paladar conjunto es la sutil combinación del sibaritismo ansonita y la ignorancia oceánica en materia de comer, los cinco caníbales de vanguardia. De lo que sí parecen grandes entendidos es de lo que viene después de comer.