Adrià, creador de contenido, sobre un mirador catalán a más de 1.500 metros de altura: "Es el sitio perfecto para venir con alguien especial"

Tranquilidad, naturaleza y unas vistas privilegiadas. Esto es lo que promete este mirador ubicado en la provincia de Barcelona. Desde su balcón se pueden avistar los Pirineos, así como la abadía de Montserrat. Además, su acceso es muy sencillo, pues se puede dejar el coche al lado. De esta manera, la experiencia es muy disfrutable.

Acudir a esta ubicación mientras baja el sol es una vivencia única. Es un lugar idílico para acudir después de un día largo, así como en un fin de semana a modo de plan relajante. La luz cálida del atardecer transforma el entorno en un escenario sereno, perfecto para desconectar sin prisas y dejar que el silencio cobre protagonismo.

Relax en las alturas

En el mirador de la Figuerassa, en Berga, el tiempo parece detenerse. El visitante puede entregarse a la contemplación, ya sea en soledad o acompañado, disfrutando de un ambiente que invita a respirar hondo y recargar energía antes de volver a la rutina. Adrià Badia, creador de contenido, ha publicado un vídeo en TikTok sobre este paradisíaco paraje.

El mencionado individuo, @adriabadia en sus redes sociales, lo describe como "el mejor mirador de los Pirineos". En su filmación combina planos aéreos y generales con otros más cortos y cercanos. De fondo, la puesta de sol. El cielo muta su paleta de colores. Según pasan los segundos, se aprecian tonos rojizos, anaranjados, amarillos y pasan a lilas y morados, previos a la noche.

Provincia de Barcelona

"Acompáñame a descubrir el mejor mirador de todos los Pirineos. Está a una hora y media de Barcelona. Una vez lleguemos a la ubicación, se puede aparcar al lado del camino. Solo hay que caminar cinco minutos para llegar. Cuando arribas, las vistas son increíbles", explica el joven creador de contenido.

"Este es el lugar perfecto para venir con alguien especial, desconectar y olvidarte de todo por un rato. Decidimos quedarnos hasta la puesta del sol y, poco a poco, el cielo se fue tiñendo de lila y naranja. Delante tuya tienes montañas infinitas y, al fondo, puedes llegar a ver Montserrat. Es uno de esos momentos que te deja sin palabras y solo quieres disfrutar del silencio", relata Adrià.

Cómo llegar

Para llegar al mirador de la Figuerassa desde Barcelona, lo más práctico es desplazarse por carretera. El trayecto habitual consiste en tomar la C-16 en dirección a Berga, un recorrido de aproximadamente una hora y veinte minutos. Al aproximarse a la capital del Berguedà, bastará con seguir las indicaciones hacia el pantano de la Baells y continuar por las carreteras locales que ascienden hacia la sierra. El itinerario está correctamente señalizado y, a medida que se avanza, comienzan a aparecer paneles que orientan hacia los principales puntos panorámicos de la zona.

Una vez en las proximidades del destino, el camino se reduce a un último tramo de carretera de montaña, estrecha pero en buen estado, que conduce directamente hasta la plataforma del mirador. En la parte superior se puede estacionar el vehículo muy cerca del balcón, lo que facilita la visita sin necesidad de realizar caminatas adicionales. El ascenso ofrece ya algunas vistas previas, pero es en el punto final donde el paisaje se despliega por completo y convierte el desplazamiento en una experiencia en sí misma.

Calma

El mirador deja una impresión duradera que va más allá de la postal perfecta. Tras la visita, queda la sensación de haber descubierto un rincón en el que la calma se mantiene intacta pese al paso del tiempo. La mezcla de altura, amplitud y silencio ofrece una desconexión difícil de encontrar en otros espacios accesibles. Al abandonar el lugar, se entiende por qué tantos visitantes lo guardan para ocasiones especiales: es uno de esos escenarios que, con una sola visita, invita de manera natural a planear la siguiente.