El pueblo de Tarragona decorado de Navidad que tiene su propio mercadillo artesanal: entrada gratis e ideal para una escapada
- Este fin de semana, el 14 y el 15 de diciembre en Valls, disfruta de un mercado único en su especie
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Los mercadillos de Navidad nos fascinan porque transforman las calles en auténticos cuentos de hadas, llenándolas de luces brillantes, aromas irresistibles y una calidez que contrasta con el frío del invierno. Estos mercados son mucho más que un lugar para comprar: son espacios donde se despiertan recuerdos entrañables y donde se crean nuevas tradiciones. Sus puestos decorados con esmero ofrecen de todo, desde artesanías únicas y adornos navideños hasta dulces típicos como turrones, mazapanes y castañas asadas.
Lo que más nos gusta de los mercadillos navideños es su capacidad para reunir a personas de todas las edades en un ambiente festivo y acogedor. Son lugares donde las familias comparten momentos especiales, los amigos celebran entre risas y los niños disfrutan de la magia de las decoraciones y las actividades.
La Feria única de Valls
Uno de los mercados de calle más típicos y concurridos de Valls es la Feria del Aviram con una buena oferta de aves vivas, capones, pavos, pollos, gansos y patos. Se celebra este fin de semana: el 14 y el 15 de diciembre, en el centro de la ciudad, de 10 h a 21 h y el domingo hasta las 20 h.
La Feria de Capones, Aves y Motivos Navideños es única en el Camp de Tarragona y es una de las pocas que se mantienen en Cataluña.
Tiene como escenarios principales el Pati, la calles de La Cort y Jaume Huguet donde se llenará de vida con una cincuentena de paradas. Además, los visitantes encontrarán productos artesanales y decoración típica para preparar las fiestas: figuras de pesebre, árboles y plantas, tions, turrones, dulces, vinos y cavas. Uno de los puntos fuertes del mercado es el de aves de corral vivo (capones, pavos, pollos, ocas y patos) que se podrá adquirir el mismo día con servicio de matadero.
Otras actividades que hacer
Entre ellas, destaca el Mercat d’Art Jove (sábado en la Plaza Pere Català Roca), un pesebre monumental en el Museo Casteller de Cataluña; también, las exposiciones en el Instituto de Estudios Vallencs y las visitas a los monumentos emblemáticos de la ciudad, como la capilla del Roser, el refugio antiaéreo y el campanario. Además, el sábado por la mañana, se podrá disfrutar del tradicional mercado de fruta y de verdura en la Plaza del Aceite.
Con el Mercado de Navidad, Valls dará el pistoletazo de salida al ciclo navideño, que incluye una extensa programación: calles iluminadas, Muestra de Escaparates en los comercios, exposiciones de arte, representaciones de los Pastorets, conciertos de Navidad, apertura del Museo Casteller, Parque de Navidad para los niños, Cabalgata de Reyes y muchas otras actividades. Para facilitar las compras navideñas, los domingos de diciembre, varios establecimientos comerciales de la ciudad estarán abiertos.
El Mercado de Navidad y FICAP 2024 estará organizado por la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Valls y el Ayuntamiento de Valls, con la colaboración de Comercio de Valls, Visita Valls, Valls Jove, el Puerto de Tarragona y La Ruta del Cister.
¿Qué ver en Valls?
Valls es una ciudad rica en historia, cultura y tradiciones únicas. Conocida como la cuna de los castells, torres humanas declaradas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Ofrece lugares emblemáticos como el Museo Casteller de Cataluña, donde se puede explorar esta tradición a través de exhibiciones inmersivas. La Capilla del Roser, con sus mosaicos de cerámica que narran la batalla de Lepanto y la imponente Iglesia de San Juan Bautista, con su campanario de 74 metros, el más alto de Cataluña, son visitas imprescindibles. Además, el refugio antiaéreo de la Guerra Civil y el casco antiguo con plazas como El Pati y rincones históricos, ofrecen una perspectiva fascinante de la ciudad y su pasado.
Los amantes de la gastronomía disfrutarán de Valls como el lugar de origen de la famosa calçotada, un festín típico que combina calçots asados, salsa romesco y carnes a la brasa, especialmente, durante las fiestas de la calçotada a finales de enero.
También, es el punto de partida ideal para explorar la Ruta del Císter, con acceso cercano al Monasterio de Santes Creus. Los alrededores naturales, como la Sierra de Miramar, ofrecen paisajes ideales para senderismo y ciclismo, completando la experiencia de una visita llena de autenticidad catalana.