Los pueblos del interior de Cataluña son auténticos tesoros que ofrecen un encanto único y una profunda conexión con la historia, la naturaleza y las tradiciones. Alejados del bullicio de las grandes ciudades, estos lugares parecen que cautivan con su serenidad. Desde imponentes montañas hasta verdes valles, los pueblos catalanes están rodeados de entornos naturales espectaculares.
Cada rincón de estos pueblos respira tradiciones vivas y auténticas. Sus fiestas locales, su rica gastronomía y sus leyendas explican la identidad singular de cada uno de ellos. Nada supera la calidez de la gente local y su hospitalidad junto con el entorno histórico, cosa que hace que visitar estos pueblos sea una experiencia única.
El pueblo de interior que enamora a los viajeros de Lonely Planet
Lonely Planet es la mayor editorial de guías de viaje del mundo, es por eso, que a través de sus redes sociales, sus viajeros han votado cuáles son los mejores pueblos españoles: Cadaqués y Besalú han sido los elegidos.
En este caso, queremos sacar a relucir toda la belleza del pueblo de Besalú. Este municipio pertenece a la comarca de La Garrotxa, en Girona y, sin duda, uno de los elementos que más impresiona en su arquitectura es su maravilloso puente medieval.
Besalú tiene su origen en un castillo documentado en el siglo X, construido sobre un cerro donde hoy se hallan los restos de la canónica de Santa María. Aunque su trazado actual no es completamente fiel al original, mantiene importantes edificaciones medievales como el puente, los baños judíos, la iglesia del monasterio de San Pedro y San Julián y la sala gótica del Palacio de la Curia Real.
¿Por qué vivir en Besalú?
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