Adiós a la Cova del Diable: esta es la cueva de Cataluña que tienes que visitar una vez en la vida

Cataluña está llena de pequeñas aldeas escondidas que ofrecen un sinfín de actividades que merece la pena hacer, ya sea en solitario o acompañado. En esta ocasión te traemos uno de esos pueblos que no solo permite disfrutar de múltiples experiencias, sino que también atrae a los más aventureros por sus fascinantes cuevas naturales. Te contamos todos los detalles para que no te pierdas nada. 

Así son las misteriosas cuevas de Cataluña

El lugar del que estamos hablando es Benifallet, un pequeño pueblo en la provincia de Tarragona que es perfecto para desconectar del estrés. Situado al norte de la comarca del Baix Ebre, hace frontera con las zonas de Terra Alta y Ribera d'Ebre. Aunque cuenta con menos de 1000 habitantes, Benifallet ha ganado popularidad entre los turistas gracias a dos cosas: las famosas Coves Meravelles, que atraen a visitantes todo el año, y su rica gastronomía.

En cuanto a la economía del pueblo, se basa principalmente en la agroindustria. A los cultivos típicos de la zona, como olivos y almendros, se suman también frutales como melocotoneros y cítricos.

Así es la cueva catalana que no puedes perderte

Muchos viajeros llegan hasta aquí con ganas de explorar las Coves Meravelles, un lugar que se ha convertido en un imán para los amantes de la naturaleza. Lo más fascinante de estas cuevas es la increíble variedad de formaciones que se pueden encontrar: estalagmitas, estalactitas, columnas, cortinas de piedra, e incluso unos “macarrones” que cuelgan del techo, entre muchas otras.

Diferencias entre estalagtitas y estalagmitas

Las gotas de agua son las que forman estos conjuntos de piedra, agua con restos de calcita (CaCO3). Con la humedad, las gotas que se forman en contacto con el techo resbalan hasta caerse por las zonas en punta del mismo. De ahí que, poco a poquito, como 'gota malaya', se vayan formando las estalagtitas. Si no hay corriente de aire, la gota caerá justo debajo de la estalagtita, y esos restos de calcitase irán acumulando unas encima de otras hasta formar las bellas estalagmitas.

Así, acaba quedando en las cuevas una apariencia de boca dentada, que en la cultura popular desembocan en nombres como cueva del diablo.

Eso sí, este fenómeno tarda miles de años en ocurrir. Se necesitan 1000 años para hacer una estalagtita de 1 metro. Las condiciones de clima y humedad de la cueva afectan mucho, así como el aire. Por eso, estas formaciones resultan altamente interesantes para conocer el clima de una región y el estado y periodo de inundaciones que hayan podido pasar en el entorno de la cueva.

Qué actividades puedes hacer en Benifallet

Benifallet es un rincón tranquilo donde los lazos entre vecinos son fuertes y se puede disfrutar de la brisa en las puertas de las casas. En menos de una hora puedes recorrer este encantador pueblo, descubriendo sus rincones más pintorescos. La plaza de la iglesia, justo al lado del Ayuntamiento, es uno de esos lugares que no te puedes perder.

En la calle Doctor Sastre, una casa con una frondosa parra llama la atención, mientras que cada hogar luce su placa familiar con orgullo. Pero, sin duda, el centro del pueblo es el convento, un edificio neoclásico que ha tenido muchos usos a lo largo de los años: instituto, oficina de correos, biblioteca y hasta consultorio médico. A la entrada del pueblo te recibe el pont del Llaguter, un puente que mejoró mucho las conexiones en la zona.

Otra actividad imperdible es la ruta en bicicleta por la Terra Alta, que termina en Benifallet y continúa hacia Tortosa. Después de pedalear, puedes recargar energías en el restaurante que ahora ocupa la antigua estación de tren. Más allá del núcleo urbano de Benifallet, se encuentra la Sierra del Cardó, con un antiguo convento medieval colgado de un acantilado y un balneario del siglo XIX. Aunque ambos están en ruinas y no se puede acceder, el balneario funcionó hasta 1967 y luego fue comprado por Leche Pascual, que planea convertirlo en un hotel de lujo.

Cómo se llega a Benifallet

Para llegar al balneario, hay que seguir una carretera sinuosa que sube hasta la cima, donde la carretera se termina y comienzan las excursiones. Una de ellas te lleva a visitar las ermitas, las formaciones de els Martells, y la impresionante ermita de la Columna, que se encuentra en un alto. Benifallet está a unos 80 kilómetros de Tarragona. Para llegar, solo hay que tomar las autovías A-7 y C-44, lo cual te llevará aproximadamente una hora de camino.