Este es el pueblo idílico de veraneo entre Tarragona y Castellón que se ha puesto de moda en Cataluña

Las vacaciones de verano son el momento más esperado del año y el más extraño a ojos de cualquier turista... Y es que, ¡sí! el país entero se para en agosto, y no es por nada: las altas temperaturas que alcanzan algunos lugares de la península impiden moverte de casa, trabajar y salir a la calle, por lo que los aprovechamos para descansar. Y es que somos sureños, aunque a veces nos guste creernos parte de la "Europa fina".

La búsqueda de un lugar tranquilo y alejado de los grandes lugares turísticos para pasar las vacaciones es cada vez más una odisea. Sabemos que artículos como estos no ayudan a que queden muchos más, pero aquí estamos para ayudar y descubrir que más allá de la Costa Brava y la Costa Dorada hay otras playas y pueblos que merece la pena explorar sin que haga falta irse a Canarias.

De un tiempo a esta parte, hay un pueblo a 40 minutos de Cataluña que se ha convertido en el lugar predilecto de aquellos que buscan un poco de paz. Se trata de Alcocéber, también conocido como Alcocebre o Alcossebre, en catalán.

Alcocéber, el nuevo pueblo de moda entre los catalanes

Ya en la Comunidad Valenciana, entre Castellón y Tarragona, se encuentra este municipio que ofrece al visitante opciones de playa, historia y hasta de montaña. Está a 40 minutos de Álcanar, hora y media de Tarragona y 2,5h de Barcelona, pero el viaje merece la pena.

Los amantes de la playa son los primeros que se sienten atraídos a la hora de explorar este rincón de la costa de Azahar. Con más de diez kilómetros de costa, Alcocebre despliega una exuberante variedad de playas y recónditas calas vírgenes dispuestas a ser exploradas.

Playas de Benicasim | WIKIPEDIA

Playas para hacer snokel

Entre las joyas costeras que uno no puede perderse está la enorme, la amplia y familiar Playa Romana, un paraíso de arena fina rodeado de vegetación mediterránea. Se trata de una de las más grandes de la zona y cuenta hasta con servicio de hamacas.

Para los que son más de explorar la vida submarina y hacer snorkel, la próxima e íntima Playa del Moro ofrece un escenario ideal para ponerse a bucear. Por último, destacar de esta zona la Playa de las Fuentes, donde pequeños manantiales de agua dulce emergen de la arena creando un paisaje único.

Naturaleza virgen

Si uno quiere seguir explorando la naturaleza al lado del Mediterráneo, se puede vivir una experiencia más salvaje en Cala Mundina o Cala Blanca, junto al Faro de Irta. Ambas ofrecen la oportunidad de sumergirse en la naturaleza virgen de la zona.

Pero si uno prefiere estar cerca de una buena terraza, algunos restaurantes donde elegir y escaparse de tiendas tras tostarse al sol, una buena oportunidad es visitar la Playa del Cargador. Una invitación a disfrutar del sol y el mar y con paseo que invita a caminarlo. Claro que el paseo marítimo de Las Fuentes tampoco está mal.

Qué puedes ver en Alcossebre

Para los que estén más interesados en explorar las calles del municipio no van a quedar defraudados. Alcocebre está impregnado de historia y cultura, como lo demuestran sus impresionantes monumentos y parajes naturales.

La Ermita de Santa Lucía, encaramada a 300 metros sobre el nivel del mar, ofrece vistas panorámicas de la costa castellonense y cuenta con una historia que se remonta más de cuatro mil años atrás. Asimismo, el imponente Castillo de Xivert, una fortificación de origen islámico, se alza como testigo de la rica herencia de la región.

Una vacaciones en plena naturaleza

Si uno es más de la naturaleza, este municipio está al lado de la Sierra de Irta, un parque natural que alberga una diversidad de paisajes impresionantes. Su biodiversidad es tan amplia como su extensión que va desde las calas escondidas, bañadas por las aguas del Mediterráneo, hasta las mismísimas montañas donde perderse haciendo rutas de senderismo y ciclismo mientras uno se maravilla con la belleza del entorno.

Por si fuera poco, además de un parque natural, Alcocebre cuenta con una reserva marina, la de las Islas Columbretes. Se trata de un pequeño archipiélago de islas volcánicas a 49 kilómetros de la costa de una gran belleza submarina. Desde el puerto de Alcocéber uno puede embarcarse hasta allí y contratar actividades de buceo y submarinismo para explorar los fascinantes fondos marinos de la reserva. La experiencia bien lo merece.

Serra de Irta | WIKIPEDIA

Los mejores sitios para comer en Castellón

Por último, destacar la riqueza culinaria de este rincón de Castellón. Estamos ya en la Comunidad Valenciana, la tierra que dio origen a la paella y que, al lado del mar, ofrece una enorme variedad gastronómica de pescados y mariscos.

Alcocebre ofrece una amplia selección de restaurantes que satisfarán incluso a los paladares más exigentes. Desde el prestigioso Restaurante El Pinar, con su exquisita cocina y vistas panorámicas, hasta el acogedor Restaurante Marimer, especializado en arroces y pescados frescos, cada rincón gastronómico es una experiencia inolvidable.