Las playas de Cataluña son, verdaderamente, impresionantes ofreciendo una diversidad de paisajes y experiencias que capturan la esencia del Mediterráneo. La sensación de la arena bajo los pies, el sonido relajante de las olas rompiendo en la orilla y el sol brillando en el cielo crean un ambiente ideal.
Además, la playa ofrece una gran variedad de actividades: desde nadar hasta practicar surf o paddleboard. Estas experiencias no solo proporcionan diversión y aventura, sino que, también, fomentan un estilo de vida activo y saludable.
Las moscas en la playa
La Cala Mosques es una maravillosa playa situada en la Ametlla de Mar, en Tarragona, en el norte de las Tierras del Ebro. Tiene unos 25 metros de largo por unos 20 de ancho; está rodeada, parcialmente, por pinos blancos y forma una bahía natural en la que sus aguas no superan los seis metros de profundidad.
Cala Mosques combina un suelo de arena fina y dorada con pequeños guijarros y su entrada en el agua es a través de una pendiente suave. A pesar de estar junto a la urbanización de Las Tres Calas y ofrecer diferentes servicios, como el chiringuito, el parking y las duchas, esta cala suele tener una ocupación baja.
Cala Mosques
Sus aguas cristalinas son ideales para los practicantes del submarinismo y del snorkel y, en su caso, con más motivo ya que es zona de paso hacia la zona de punta Galera, de gran riqueza en fauna marina y donde se permite la pesca submarina.
Si te gusta practicar la vela, a solo dos kilómetros, se encuentra el club náutico de la urbanización de Calafat, con una gran oferta de deportes náuticos, como el kayak y el piragüismo.
Cala Mosques
Cómo llegar
La Cala de les Mosques se encuentra en la Urbanización Les Tres Cales, s/n, en la Ametlla de Mar. La manera de acceder a ella es a través de la carretera N-340, en dirección a esta urbanización, por la autopista A-7 y tomando la salida 39.