Varias personas durante la manifestación convocada por la ANC, a 11 de septiembre de 2025, en Barcelona

Varias personas durante la manifestación convocada por la ANC, a 11 de septiembre de 2025, en Barcelona Kike Rincón Europa Press

Primeras planas

Diada de mínimos históricos y mucha lengua

Tocando fondo. Lluís Llach, inasequible al desaliento está a punto de perder la voz. "¡Somos los de Urquinaona!", se desgañita. "¡Fuera españoles y fuera musulmanes", gritan los de Orriols

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El independentismo de calle no da más de sí. Después de tres lustros, ha quedado reducido a la esencia. Es lo que hay: 28.000 personas en Barcelona, según la Guardia Urbana; 12.000 en Gerona según el Ayuntamiento de la CUP y 1.500 en Tortosa.

Son cifras menores, mínimas, ridículas incluso frente a aquellas masas norcoreanas que en los años centrales de la pasada década salían a las calles al llamado de personajes como el ínclito Artur Mas, la brava Carme Forcadell, el indómito Jordi Sànchez y el no menos temerario Jordi Cuixart. ¿Qué habrá sido de ellos? De Cuixart se dice que no le pueden ir mejor los negocios en Suiza.

Es francamente dudoso que dos millones de personas se manifestaran por la independencia en los años álgidos de Procés, pero eso es lo que decían unos medios y unas policías que remaban a favor de la causa secesionista, que se entusiasmaban con las coreografías de la Assemblea Nacional Catalana (ANC). Si esas cifras hubieran sido ciertas, la república catalana sería un hecho.

La ANC suspendió ayer la protesta a las puertas del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) por su última resolución sobre los idiomas en la escuela. La pena, según algunos de los organizadores, es que no cayera por la tarde el chaparrón matinal para suspender también la manifestación.

El bueno de Lluís Llach estuvo a punto de perder su bien más preciado, la voz. Pero se sobrepuso y soltó una arenga de las que hacen época.

El cantautor está más radicalizado que nunca. Es normal. Suele pasar en los procesos de inflamación y descomprensión. En la curva descendente la gente aguanta subiéndose por las paredes. Y es lo que hizo Llach, tal vez pensando que era su último gran discurso. Quién sabe qué será de la ANC en el futuro.

La preservación de la lengua catalana fue la causa transversal. Dicen que el catalán está en peligro. Sacan las encuestas que lo sostienen. Las que sostienen lo contrario se las guardan.

En el resumen de prensa recogemos también la otra Cataluña, la de los partidos y entidades constitucionalistas que no se sienten en absoluto concernidos en una fiesta donde les llaman "fascistas" por hablar en español.

"El fracaso de la Diada confirma el fin del 'procés'", proclama este diario, Crónica Global. La pieza viene con la firma de Albert Martínez: "Es el fin del procés. La Diada del 11 de septiembre de 2025 ha confirmado el fin del viraje independentista que sufrió una parte de la sociedad catalana en 2012, bajo el gobierno convergente de Artur Mas".

"Este año, apenas 41.000 personas han salido a la calle a reclamar la secesión de la comunidad, el mínimo histórico desde 2011. Es casi la mitad de asistentes que en 2024, cuando 74.000 manifestantes poblaron las calles de Girona, Barcelona, Tortosa, Tarragona y Lleida".

"Desde antes de 2012 no se vivía una Diada con una menor presencia independentista en las calles, antes de que Artur Mas azuzara el procés con el sueño de una Cataluña desunida de España".

"En apenas un año, los asistentes a la marcha pasaron de 10.000 a 1,5 millones, que en los cursos siguientes llegarían a rozar los 2 millones, según las cifras que ofrecieron las policías locales entonces".

"Este curso, sin embargo, las otrora multitudinarias protestas han quedado reducidas a un aquelarre comandado por Lluís Llach, presidente de la ANC".

La pieza también apunta a la estabilidad institucional y las guerras civiles del independentismo como factores desmovilizadores y concluye así: "Pilar Rahola, gran dama del independentismo la pasada década, también se ha ausentado de la protesta. Ha argumentado que "no le encuentra el sentido a una Diada en la que el independentismo está desunido y sin objetivos claros"". Pues vaya manera de dar ejemplo...

"El independentismo busca nuevo plan en pleno retroceso: desobediencia e hispanofobia", destaca El Confidencial. La pieza es de Antonio Fernández, quien tras calificar de "batacazo en toda regla" la manifestación escribe: "El primer punto es una gran campaña desde diferentes ámbitos y organizaciones o partidos para denunciar la “extinción del catalán”. Es un tema muy manipulable y los independentistas lo saben".

"En realidad, los informes oficiales que esconden el Govern y la Plataforma per la Llengua hablan de que pasa por el mejor momento de su historia y no está, ni mucho menos en peligro, porque es el uno de los idiomas oficiales del territorio y la lengua utilizada por las distintas capas de la Administración pública. Pero eso no va a ser un obstáculo para persistir en la mendaz afirmación de que España quiere matar el catalán".

Esa obsesión estadística sobre la supuesta desaparición del catalán resultaba desde el principio muy sospechosa. Ocurre que el independentismo está tan acostumbrado a imponer sus relatos alternativos que no le importa la ausencia de verosimilitud.

Continúa Fernández con un interesante apunte sobre la gracieta esa de llamar Isla al señor Illa: "El segundo eje estratégico es ahondar en el mensaje hispanofóbico de que Cataluña no tiene libertad y es una nación oprimida por un Gobierno totalitario. Este aspecto tiene dos vertientes. Por un lado, el acoso a Salvador Illa y su Govern. Como acto propagandístico, los principales gurús soberanistas se refieren al presidente de la Generalitat como “Isla”, la traducción de Illa al castellano. Es el primer paso de la deshumanización del enemigo".

Párrafos después destacan estas líneas: "El independentismo se quiere tirar al monte. La gran manifestación de Barcelona comenzó con cinco encapuchados quemando una bandera española ante las miradas complacientes de Lluís Llach (presidente de la ANC), Xavier Antich (presidente de Òmnium) y Jordi Domingo (presidente de del Consell de la República)".

"Y terminó con Llach apelando a la violencia. “Somos los de Urquinaona”, arengó a los presentes, vinculándose a las violentas manifestaciones que tuvieron lugar en la plaza Urquinaona en otoño de 2019. “¿Quién fue el burro que dijo que quemar contenedores es violento? ¿Quién fue el burro?”, repitió en un par de ocasiones para apelar a un supuesto espíritu combativo y señalar el camino del nuevo independentismo".

"Y subrayó: “Podemos hacerlo y que todos lo tengan claro: sin la fuerza de la calle, el independentismo no tendrá nunca mayorías sólidas en el Parlament. Sólo por la fuerza de la calle alcanzaremos a la independencia”".

Lluís Llach, 77 primaveras le contemplan, y ahí está, blando como una acelga chuchurría pero dispuesto a asaltar el palacio imperial. Luego dicen que si Sílvia Orriols es un peligro... Precisamente de esta señora ultra habla El País, que dice que "La ultraderecha de Sílvia Orriols gana protagonismo en la Diada y acusa de “sectaria” a la ANC".

Portada de El País (España)

El texto es de Alfonso L. Congostrina: "Una de las grandes protagonistas de esta Diada ha sido la líder de Aliança Catalana, Sílvia Orriols. La alcaldesa de Ripoll y líder del partido ultra, xenófobo e independentista que ha conseguido ser la única dirigente política que ha salido triunfante de los actos del 11 de septiembre de este año".

"De hecho, Aliança Catalana ha sido el único partido que ha desfilado este jueves con bandera, logos y pancarta propia, frente a Junts o ERC, cuyos dirigentes se han difuminado en la manifestación principal".

"La presencia de Orriols en la gran marcha independentista venía cargada de polémica. Esta semana el presidente de la ANC, Lluís Llach, declaraba que no quería un “Vox Catalán” y acusaba a Aliança Catalana de no cumplir con “toda la moral democrática”. Tanto ANC como Òmnium excluían, de esta forma, a la formación de extrema derecha de la manifestación que llevan años coorganizando".

"Orriols, que sabe moverse en la confrontación, ya avisó en la red social X: “Me daba pereza ir, pero ahora iré, aunque solo sea para llamarles mediocres y sectarios a la cara”. Dicho y hecho, la líder ultra ha desembarcado en la manifestación de la Diada".

Atención a las siguientes líneas, que describen a la perfección el sesgo xenófobo y racista del partido: "Centenares de simpatizantes la han recibido al grito de “Sílvia Orriols es la solución”".

"La líder de Aliança ha sido vitoreada y reclamada para numerosos selfies mientras sus simpatizantes la animaban con diferentes proclamas: “Fuera españoles y musulmanes”, “Puta TV3”, “No es inmigración, es invasión”, además de insultos contra Salvador Illa o a Carles Puigdemont, al que han insultado al grito de “traidor”".

"Además, los de Aliança Catalana no han ocultado su posición en el conflicto israelí y cada vez que veían una bandera palestina en la marcha gritaban al unísono: “Menos Palestina y más Cataluña”. La líder ultra también ha recibido reproches –básicamente, “fuera fascista”- pero muchos menos que vítores".

Congostrina apunta que "los Mossos temían que la presencia de los ultras provocara algún tipo de enfrentamiento, por lo que han mantenido a Orriols y los suyos en una plaza en frente a la sede de Correos de Via Laietana".

"Una barrera policial impedía que en la manifestación de la ANC y Òmnium confluyera el grupo de Aliança. Aún así, las labores de mediación del cuerpo policial han permitido a los de Orriols seguir la marcha una vez pasara la cabecera de la ANC y por el carril paralelo al que marchaban los de Lluís Llach. La de Ripoll ha marchado hasta Colón donde los Mossos han vuelto a apartar a los ultras y derivarlos a la zona de las Golondrines".

Y: "En ese corto trayecto Orriols ha recibido gritos pero, sobre todo, aplausos, vítores y muchas selfies. Ovaciones a un partido que ha concentrado cerca de un millar de personas en una protesta a la que no eran bienvenidos por los organizadores".

En El Mundo es Iñaki Ellakuría quien comenta la emergencia de la Aliança. Escribe que estamos ante "una nueva Cataluña, coherente con su tradición mestiza, que agrava la sensación de derrota colectiva en el independentismo tras la oportunidad perdida en 2017, empujándole a una deriva abiertamente xenófoba y conectada con el discurso ultraidentitario que crece en Europa".

Portada de El Mundo (España)

"Una de las novedades de la Diada fue la presencia normalizada de Silvia Orriols, líder de Alianza Catalana, y que tiene la virtud de expresar en público la xenofobia que los nacionalistas comentaban en privado".

También destaca el tono melancólico del día: "El estado de ánimo independentista lo definió un inesperado mensaje en las redes sociales de Pilar Rahola, quien fuera la propagandista más destacada del golpista procés: "Por primera vez en años no iré a la Diada. No sé muy bien cuál es el sentido ni qué se va a defender. ¿Os pasa lo mismo?"".

Pero advierte de que el fiasco callejero nada tiene que ver con el peso del nacionalismo: "La evidente deserción popular que ha sufrido el nacionalismo -un fenómeno político y sociológico digno de estudio- no ha ido acompañada por la lógica disminución de su presencia en las instituciones y capacidad de influencia. Al contrario, el nacionalismo todavía es la ideología hegemónica y la que contamina la vida oficial y subvencionada: los medios públicos como TV3 y RTVE, la universidad, la escuela, la patum cultural, el Barça, los funcionarios de la Generalitat..."

Más de la Diada. Los medios de orientación independentista reparan en que el desastre podría haber sido peor. De modo que en El Món titulan "Exito contra pronóstico" y en El Nacional recurren a un trino del ausente. "Puigdemont defiende que la Diada ha demostrado que el independentismo resiste: 'Todavía estamos aquí'". Claro, como el muerto vivo de Peret.

La parte constitucionalista de la sociedad catalana no se siente precisamente representada en la Diada. Organizaciones como Sociedad Civil, Asociación por la Tolerancia, Convivencia, Impulso Ciudadano o la Asamblea por una Escuela Bilingüe preferirían que la Diada se pasara a Sant Jordi.

En El Mundo, Gerard Melgar habla con dirigentes de estas entidades: "«Nada que celebrar, no nos sentimos interpelados por una Diada excluyente». Frente a la conmemoración institucional o la reivindicación del independentismo, la festividad del 11 de septiembre sigue despertando indiferencia o incluso rechazo en una parte de la sociedad catalana".

"«La fiesta autonómica tendría que ser el 23 de abril [día de sant Jordi], preferimos un libro y una rosa que dar vueltas a mitos del pasado en gran parte inventados», sostiene Álex Ramos, presidente de Societat Civil Catalana (SCC), que desde su fundación en 2014, en plena irrupción del procés, se ha convertido en una de las principales entidades constitucionalistas de la región".

"Ramos, como José Domingo (Impulso Ciudadano), Ángel Escolano (Convivencia Cívica Catalana) o Carlos Basté (Asociación por la Tolerancia), es una de las voces que alerta de que el cambio de era política en Cataluña, con la llegada del PSC a la Generalitat hace un año, no difiere mucho de las inercias de los anteriores Gobiernos independentistas de Junts y Esquerra Republicana".

"«Es una falacia que las medidas de Pedro Sánchez o Salvador Illa hayan traído la normalidad», dice el líder de SCC y médico de profesión. «El artículo 155 y la Justicia descabezaron el movimiento separatista, lo que ha venido después es simplemente tratar de justificar todas las concesiones que les han exigido para poder llegar al poder y mantenerse en él», añade Ramos".

Y: "Los cuatro coinciden en que «hoy es más necesario, si cabe, que exista un activismo en Cataluña en defensa del marco legal y la nación española». «A base del entreguismo socialista, las fuerzas independentistas están consiguiendo lo que nunca habían logrado desde el poder», critica Domingo".

"En este contexto, el presidente de Impulso Ciudadano cree que es importante disociar la apariencia de la realidad. «Es evidente que las formas son distintas, la bandera española, por ejemplo, está ahora presente en el despacho del presidente de la Generalitat», concede, pero al mismo tiempo advierte: «A Illa no le está temblando el pulso a la hora de endurecer la política lingüística que aplicaban Junts y Esquerra y que supone una auténtica invasión del espacio privado»".

Más noticias. "TV3 sube el sueldo al productor independentista más 'mordaz': 3,6 millones de euros", señala un titular de El Independiente acompañado de una foto de Toni Soler.

Escribe Rubén Arranz: "Toni Soler fue uno de los rostros mediáticos más relevantes durante la parte central del proceso soberanista en Cataluña, no sólo por su activismo, sino también por los contenidos de sus programas para TV3, alineados en muchas ocasiones con las tesis de los partidos que avivaron el desafío a la Constitución en 2014 y 2017. Este empresario comanda la productora Minoría Absoluta, en la que ejerce como administrador desde hace un cuarto de siglo".

"Su formato más popular es Polònia, caracterizado por sus números de humor y sátira con la política catalana y nacional. Fueron especialmente populares sus imitaciones de Juan Carlos I durante los últimos años de su ruinado (sic), envueltos en polémica. Pese a la acidez de este espacio, ha sido reconocido en galardones como los Ondas o los de la Academia de Televisión".

"TV3 gasta en este programa una parte relevante de su presupuesto para producciones externas. Recientemente, ha revelado que el presupuesto para temporada 25/26 asciende a 3.641.188 euros. No ha ofrecido más detalles sobre el número de programas, pero el acuerdo para su renovación se confirmó el pasado julio".

"Esta cantidad es superior a la que recibió la productora durante los dos últimos ejercicios, que fue de 3,46 millones en el caso de la temporada 2024/2025 y de 3,51 millones en el de la campaña 2023/2024. De hecho, es el mayor montante desde, al menos, 2015".

"No es el único producto de esta empresa que ha contratado la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales durante el último año. Durante 2025, el importe de sus encargos asciende a alrededor de 4,2 millones de euros".

Y: "Un año antes, superaron los 6,5 millones de euros, aunque esa cantidad incluye el magacín Està Passant -de un género similar a El Intermedio, de El gran Wyoming-, cuyo montante para la nueva temporada todavía no ha sido revelado".

Arranz explica también que Soler es uno de los agraciados con el canal catalán de TVE: "Recientemente, ha trascendido que esta empresa formará parte de las elegidas para desarrollar la parrilla de programación de 2Cat, es decir, el canal en catalán que lanzará RTVE como parte del acuerdo político entre el PSOE y Junts".

Y: "El programa que realizará se llamará L'any que vas neixer y el presupuesto de los 13 capítulos contratados asciende a 496.739 euros, según han detallado fuentes internas de la televisión pública".

12 de septiembre, santoral: Dulce Nombre de María, Nuestra Señora Santa María de Lluc, reina de Mallorca, Nuestra Señora de la Fuensanta, Nuestra Señora de Estíbaliz, Autónomo de Bitinia, Guido de Anderlech, Poncio de Serrancolin, Albeo de Emly, Curonato y Francisco Ch´oe Kyong-hwam.