Collboni y las deudas de Aragonès con Barcelona

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha entrado en modo gran estadista desde el pasado 28 de mayo, cuando a ERC se le disiparon en las urnas más de trescientos mil votos. Desde entonces, nuestro president no para de lanzar proclamas y propuestas para constituir frentes unitarios y democráticos, pero solo para independentistas y soberanistas. Además, pretende fijar un "precio" si Pedro Sánchez requiere del concurso de ERC y Junts tras las elecciones generales para formar gobierno. Y por si no fuera suficiente, se permite críticas sobre el pacto que ha llevado a Jaume Collboni a la alcaldía de Barcelona que no cuadran con el perfil institucional que debería marcar las intervenciones del presidente autonómico. Que fue un "pacto contra natura", dice Aragonès. Y lo dice quien es presidente gracias a un pacto de ERC con Junts, que son dos partidos que se odian de manera tan feroz como indisimulada. ¿Cabe algo más contra natura?

El alcalde, por su parte, se estrena repasando las cuentas pendientes con la Generalitat y repara en que la Administración autonómica no ha concretado aún las inversiones que el PSC negoció con ERC para Barcelona cuando consensuaron los últimos presupuestos autonómicos. Es lo que cuentan en El País Clara Blanchar, Camilo S. Baquero y Àngels Piñol: "La del nuevo Ayuntamiento de Barcelona y la Generalitat no será una relación complaciente. O al menos no tanto como Esquerra Republicana había previsto si el alcalde de la capital catalana era Xavier Trias con el apoyo de Ernest Maragall. El nuevo alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, no ha tardado ni tres días en lanzar un mensaje de profundidad sobre cómo serán desde ahora las relaciones entre el primer Ayuntamiento de Cataluña y el Govern. El socialista recordó este martes al president Pere Aragonès que el apoyo de los socialistas a su presupuesto iba de la mano del compromiso de invertir 340 millones de euros en la capital catalana. La cifra supone casi un 10% del presupuesto municipal (3.600 millones). En transporte público (sobre todo metro), seguridad, sanidad, servicios públicos... y también convocando la comisión técnica entre las administraciones que deben decidir cómo se ampliará la capacidad del aeropuerto de Barcelona. Las palabras de Collboni este martes no fueron un reproche, pero recordó el compromiso que Aragonès adquirió con el líder de los socialistas, Salvador Illa, en un mensaje ausente de hostilidad pero que avisa de que la relación del Ayuntamiento con el otro lazo de la plaza de Sant Jaume no será complaciente. La consejera de Presidencia, Laura Vilagrà, respondió que la reunión oficial entre ambos ejecutivos será antes de finales de julio, después de que Collboni apruebe el cartapacio, la estructura del nuevo gobierno y el reparto de asesores entre los partidos del Ayuntamiento".

De momento y en relación a lo que está en su mano, "Collboni mantiene provisionalmente a los 38 gerentes del Ayuntamiento", apunta La Vanguardia. La pieza es de Ramon Suñé y dice así: "El nuevo alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha dado un nuevo paso en su promesa de asegurar, al menos durante este período inicial del mandato, la continuidad de la estructura organizativa del Ayuntamiento de Barcelona, que se mantiene intacta respecto al anterior periodo municipal con Ada Colau al frente del Ayuntamiento. La Gaseta Municipal publicó ayer cuatro decretos de alcaldía con el cese, en primer lugar, de todo el personal de alta dirección (gerentes) y del personal eventual contratado por los distintos grupos políticos y, a continuación, con el nombramiento y, por tanto, la reposición en sus respectivas funciones de estas mismas personas. (...) En esta primera tanda de nombramientos –de hecho de renovaciones provisionales de confianza– se cuentan 26 del PSC, 25 de BComú 12 de ERC, 6 de Junts y 4 del PP. No aparece de momento ninguna designación por parte de Vox, formación que ha entrado por primera vez en el Ayuntamiento de Barcelona con dos concejales".

Más noticias. El expresidente de la Generalitat huido en Bélgica, Carles Puigdemont, declarará como testigo en el juicio al exconsejero de Interior Miquel Buch y al sargento de los Mossos Lluís Escolà, al que se imputa un papel protagonista en la fuga de Puigdemont y en la custodia posterior del dirigente independentista en Waterloo. En el caso de Buch, su "problema" es haber nombrado a Escolà asesor de la consejería mientras el hombre no hacía más que ir de Waterloo a Barcelona y viceversa. La cuestión es que Puigdemont podrá declarar de manera telemática en la Audiencia de Barcelona cuando resulta que el Tribunal Supremo no aceptó su testimonio durante el juicio a sus colegas de proclamación de la república precisamente por estar fugado de la justicia. 

Al respecto cuenta Elena Burés en el Abc que "durante la tercera jornada del juicio, el 30 de junio, el propio Puigdemont, tal y como estaba previsto, declarará como testigo por videoconferencia. Después de que en septiembre de 2021 así lo solicitase la defensa del policía, que ejercen Isabel Elbal y Gonzalo Boye y que la Sección 2ª aceptó en su auto de admisión de prueba. No será la primera, ya que el pasado diciembre también lo hizo, a través de una pantalla, en un juzgado de Pozuelo de Alarcón, por la demanda que interpuso contra un periodista, según ha podido saber este diario".

Más madera. El sumario del Tsunami Democràtic corre por algunas redacciones madrileñas y en él aparecen curiosas actitudes de los promotores de las protestas. Por ejemplo, a Marta Rovira le mosqueaba sobremanera la renuencia de Pere Aragonès, entonces consejero de Economía del Govern Torra, a involucrarse en la movida. Es lo que cuentan en El Confidencial Beatriz Parera, Pablo Gabilondo y José María Olmo: "Del contenido de las charlas se deduce que los inicios del movimiento levantaron suspicacias en un sector de ERC y que Vendrell contaba con Rovira para vencerlas. En varios momentos, llega a plantearle contactar con otros cargos de la formación independentista para recabar apoyos o visitar la cárcel de Lledoners, donde cumplía por entonces prisión preventiva Junqueras. Según la propia Rovira, este último también se había mostrado "muy inquieto" por las posibles repercusiones de un movimiento que protagonizó acciones como el bloqueo del Aeropuerto de El Prat o los cortes en la AP-7. Ambos mencionan la posibilidad de hablar con "Lluís" y con "Pere", a quienes la Guardia Civil vincula con el diputado del Parlament Lluís Salvadó y el actual presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. "Si quieres hablo con Pere o con quien tú digas, pero no puede ser que los nuestros lo revienten", le dice Vendrell a Rovira en una de las conversaciones, fechada en octubre de 2019. Los dos coinciden en lamentarse de que el "tema Tsunami" no cuenta con la bendición de organizaciones y partidos, hasta el punto de que determinadas personas directamente lo rechazan. "Mi gente puede hacerlo sin el apoyo de la estructura, pero no con la estructura en contra", avisa Vendrell".

Qué grande Vendrell. Ahora es una celebridad en Colombia, donde asesora al presidente Petro y hace negocios. Pero la cosa del Tsunami no se queda en las inquinas internas de los prebostes de ERC. El mismo digital comenta que "la investigación sobre Tsunami Democràtic ha descubierto contactos entre ERC y el Front Nacional de Catalunya, una formación independentista de extrema derecha y abiertamente xenófoba que ha irrumpido con fuerza en la política catalana en las últimas elecciones municipales. Mensajes intervenidos por la Guardia Civil revelan que representantes de ambos partidos establecieron un canal secreto de comunicación para tratar de forjar una alianza contra el Estado y movilizar al mayor número posible de seguidores para las manifestaciones contra la sentencia del 1-O".

Vaya con ERC, contactos con el Front Nacional. Y luego mucho criticar a la señora Orriols de Ripoll. 

Ayer se presentó la candidatura al Congreso de Junts con la intervención estelar de Toni Castellà, de Demòcrates. De la crónica de Pedro Ruiz en El Nacional: Durante el acto, también han intervenido los candidatos que encabezan las listas de Girona, Tarragona y Lleida, y el cabeza de lista en el Senado, Toni Castellà, que ha sido uno de los más contundentes contra el riesgo de abstención de los independentistas el 23-J: "No es una opción. El sueño del nacionalismo español era hacer una reforma electoral para que tanto vascos como catalanes no tuviéramos ninguna capacidad de condicionar el Estado y, a la que puedan, lo harán. A la gente que defiende la abstención, lo que comportará es el objetivo que quiere el nacionalismo español, un tiro en la cabeza". Castellà ha añadido que "el unionismo, a pesar de no creer en las instituciones catalanas, no renunciaría a presentarse en Catalunya; de manera que nosotros tampoco lo tenemos que hacer, tengamos sentido de Estado también". "Soy consciente de que hay gente fastidiada y hay muchas cosas que se han hecho mal, pero no todo el mundo es igual, nosotros nos hemos mantenido leales al 1 de octubre y trabajamos para recuperar la unidad", ha destacado el líder de Demòcrates". 

Toni Albà y Freddi Bentanachs... ¿Qué puede fallar?

La buena noticia del día es que el restaurante Disfrutar es el segundo mejor restaurante del mundo por detrás de otro llamado Central y que está en Lima. El tercero es el madrileño Diverxo.

21 de junio, santoral: Luis Gonzaga, Demetria de Roma, Engelmond abad, José Isabel Flores Varela, Juan Rigby, Leufredo, Meveno de Gaël, Radulfo de Bourges y Raimundo de Barbastro.