La prensa independentista 'sofoca' los incendios
Tupido velo sobre los incidentes de anoche en los medios afines a la causa independentista. El independentismo se despide de su idilio con los Mossos
16 octubre, 2019 09:15Día transparente en la prensa, aperturas meridianas por lo que dicen y lo que ocultan, jornada de puertas abiertas en las salas de máquinas de los medios. El procedimiento de los partidarios, afines o comprensivos con la causa independentista es reducir la noche de las barricadas de fuego a tema de tercera, por detrás de otros aspectos del "momentum" Torra. Por ejemplo, Público, que a las siete de la mañana titulaba que "El PSOE aprovecha la postura de Iglesias sobre la sentencia para descartar la coalición con Podemos". Ya luego, en tercer lugar, advertía a sus lectores de que "Las protestas en las delegaciones del Gobierno y los cortes de carreteras marcan el día 2 tras la sentencia".
En El Diario recurrían al mismo sistema con el siguiente titular de cabecera a la antedicha hora: "El Tsunami Democràtic por dentro: tres meses de trabajo en la sombra para intentar colapsar dos aeropuertos". La prensa soberanista radicada en Cataluña recurría a similar "estrategia". Así, El Nacional abría con su revista de prensa: "‘La Vanguardia’ i ‘El Periódico’ inclinen el cap en un editorial (gairebé) conjunt". La segunda noticia, luego primera, es que "Comencen les marxes per la llibertat de rebuig a la sentència". En tercer lugar, una versión entre aséptica y equidistante de lo ocurrido hace pocas horas: "El pols contra la sentència persisteix al carrer: més protestes i més càrregues".
Otro medio que se acoge a la carta del Tsunami es Nació Digital, que abría así a primera hora: "El Tsunami respon a Marlaska: «No tenim por. El problema és que no hi ha alternativa»". Vilaweb, por su parte, opta por la movida del día: "Marxes per la llibertat: cinc columnes caminaran cap a Barcelona". Sólo El Món hablaba en apertura de los incidentes con una suerte de alusión a la combustión espontánea: "Catalunya s'encén".
Hay otros medios que no ocultan la realidad. Crónica Global concluye que "Torra deja Cataluña en manos del secesionismo violento" y El Español titula que "El Gobierno constata la "violencia generalizada y coordinada" en Cataluña". En parecida línea, Libertad Digital apunta que "El Gobierno asume ahora la violencia tras los múltiples altercados en Cataluña" mientras que El Confidencial asegura que "Quim Torra pierde el control de la calle y el caos se vuelve contra la Generalitat". En el e-notícies van con un entrecomillado, "Mateu-lo, mateu-lo!", las palabras de un grupo de "activistas" que lograron derribar a un mosso d'esquadra.
El mismo esquema se presenta en la prensa de papel. Así, El País titula con que "El Gobierno denuncia a grupos violentos coordinados en Cataluña" y El Mundo describe: "Arde Cataluña después de alentar Torra las protestas". En ABC se quedan con que "El separatismo vuelve a enseñar su entraña violenta" y en La Razón dan la palabra a los Mossos: "Quienes nos insultan y agreden hace dos años nos tiraban flores".
De la prensa editada en Cataluña, tanto La Vanguardia como El Periódico subrayan los disturbios. "Batalla campal en Barcelona" dice el primero; "Los CDR llevan el caos al centro de Barcelona" sostiene el segundo. En cambio, El Punt Avui apunta a la "Mobilització contínua" sin fuego en la foto, sino un chico corriendo, mientras que el Ara recurre a una entrevista a Sànchez para abstenerse de dar relieve a las manifestaciones nocturnas: "Marchena ha fet la sentència que consagra el conflicte polític".
¿Y qué es lo que ha pasado? El secesionismo más ortodoxo lo tiene claro, como muestra un titular de La República: "L’esperit dels Mossos el 17A i 1-O contaminat per la presència dels comandaments policials espanyols en l’operatiu policial conjunt". La tesis es que si las policías no se hubieran interpuesto entre los manifestantes y la delegación del Gobierno no habría pasado nada. Tal vez hubieran linchado a algún policía nacional de la policía "espanyola" o prendido fuego a la delegación, pero nada que ver con la gravedad de lo acontecido. Vicent Partal en Vilaweb es claro al respecto: "L’actuació dels Mossos d’Esquadra aquest vespre a tot el Principat és intolerable i ningú, ni tan sols en nom de l’independentisme ni de l’estabilitat del govern, no pot permetre que passen les hores sense respondre a l’orgia de violència desfermada pel màxim responsable dels Mossos d’Esquadra".
Y añade: "Avui, per primera volta, la policia de Catalunya, o les pitjors unitats que la integren, han atacat un acte d’Òmnium i l’ANC. Després d’un decenni sencer de mobilitzacions, per primera vegada un acte multitudinari i pacífic de la societat catalana ha acabat amb enfrontaments gravíssims. La culpa i la responsabilitat d’això la tenen els Mossos d’Esquadra, que no es poden amagar rere l’excusa de gent amb caretes o incidents esporàdics. La gravetat d’allò que han fet avui supera qualsevol llistó posat abans".
De momento nadie acusa a las cloacas del Estado de haber organizado los disturbios infiltrando agentes provocadores entre los cívícos y los pacíficos. En cambio, en el secesionismo hay un profundo malestar con los Mossos. El economista Xavier Sala i Martín, por ejemplo, arremete contra un agente del cuerpo y hasta contra el presidente del Gobierno, al que llama "cretino" en un mismo tuit. Del e-notícies: "L'habitual col·laborador de TV3 diu "porc" a twitter a aquest agent i "cretí" a Pedro Sánchez. Posteriorment li aclareixen que l'agent en qüestió és mosso -i no Policia Nacional-, davant del que l'economista respon "i quina diferència hi ha?". En una altra piulada en anglès, Sala-i-Martin escriu que "un policia espanyol dispara un manifestant", tot i saber que es tracta d'un mosso".
Todo apunta, por otra parte, a que al Gobierno no le va a quedar más remedio que tomar cartas en el asunto, según escribe Isabel Garcia Pagán en La Vanguardia: "La Moncloa no señala un problema policial. Todo lo contrario. El Gobierno reconoce la labor de las fuerzas y los cuerpos de seguridad del Estado y “valora de manera muy positiva la coordinación y el trabajo conjunto con los Mossos”. Pero el terreno ya está abonado para tomar decisiones drásticas como la aplicación de la ley de Seguridad Ciudadana o un nuevo 155 acotado a determinadas competencias, que Pablo Casado no dudó en reclamar con urgencia. Albert Rivera responsabilizó a Pedro Sánchez de la “ola de violencia” en Catalunya y pidió “protección” contra “los radicales separatistas”".
En El País, Manuel Jabois describe los ánimos previos a los disturbios entre la grey independentista: "Hasta las 19:30 no empezaron los discursos de la concentración en Carrer de Mallorca: críticas durísimas a la sentencia, gritos de “viva la República” y “Cataluña libre”, y una marea de gente alrededor y por las calles adyacentes armadas con velas, luces que fueron llenando todo a medida que la noche caía. Todo tenía un componente religioso muy acusado; todo llevaba, allí cerca del escenario, a un atmósfera de martirio que exigía los lamentos más crudos y las reacciones más justas en proporción al castigo. Por eso, en esa zona más céntrica de la concentración, se acumulaba más gente mayor, familias enteras y niños, mientras que en las partes más abiertas había más chavales, en territorios donde se presumía que estallarían los disturbios. Sergi y Joan, dos universitarios que salían para allá, advertían de lo caliente que estaba “la cosa”: “Nos pegaron como animales en Via Laietana y nos quitaron un ojo en el aeropuerto”, dicen".
Ecos de la intervención de Pep Guardiola en calidad de portavoz del Tsunami. Rubén Amón se refiere al caso en El Confidencial: "No le faltaron razones al míster del Manchester para denunciar la opresión, la restricción de libertades y el ataque a los derechos humanos, pero hubiera tenido más sentido adjudicárselas a Qatar, la satrapía donde reside el camarada Xavi con todas las peculiaridades medievales. O reprochárselas el presidente y propietario de su club, el jeque Khaldoon Al Mubarak, cuyo país de origen y de gobierno, Emiratos Árabes, aplasta las libertades elementales. (...) El fútbol se ha convertido en el gran aliado sentimental del soberanismo. Quizá porque los estadios —aquí y allá— han descrito los humores de la sociedad con antelación y unos grados más de temperatura. Son espacios de exacerbación, 'calderas de pasiones'. Las guerras balcánicas se declararon antes en los campos de césped mullido que en los campos de batalla abruptos".
Más ecos, en este caso de la sentencia. Luis María Anson sale en defensa del juez Marchena en El Mundo: "Si la sentencia del Tribunal Supremo hubiera condenado por rebelión, la probabilidad de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos la casara habría sido muy alta. El descrédito de la Justicia española hubiera alcanzado cotas apabullantes y se habría proporcionado a los secesionistas un arma formidable. Es muy fácil esgrimir algún artículo del Código Penal para fragilizar al TS. Pero los que conocen el ordenamiento jurídico nacional y europeo son los magistrados y no los periodistas. Los jueces del Supremo tienen además dilatada experiencia para aplicar la Justicia con prudencia y equidad".
En el fragor de la batalla, El Diario participa a sus lectores de una encuesta en la que se aprietan las posiciones. El PP se acerca al PSOE. Estos son los datos: PSOE, 27,3%, 117; PP, 22,2%, 102; UP, 13,7%, 37; Cs, 11,4%, 29; Vox, 8,4%, 20; ERC, 4,2%, 15; Más País, 4,9%, 7; JxCat, 1,5%, 6; PNV, 1,6%, 6; Otros, 3,8%, 7.
Problemas en el AVE a Girona. El Govern da cuenta en un mensaje de Twitter de los consejeros que participan en las marchas sobre Barcelona. Las reacciones de los independentistas y los no independentistas en el hilo subsiguiente no son favorables.
16 de octubre, santoral: Eduvigis, Gerardo Mayela, Margarita María de Alacoque, Longinos soldado y Vidal de Retz.