Primeras planas

Alcaldables patéticos y crisis culé

Ya es tradición: los candidatos por Barcelona salen en las portadas haciendo el bobo o el gamberro. El Valencia gana la Copa. Estupor barcelonista. Valverde, en la cuerda floja

26 mayo, 2019 10:36

Fotos de alcaldables. Son capaces de cualquier cosa. Llegará el día en que posen en pelotas. Un calvo colectivo para la primera. Ya es tradición que los aspirantes a la alcaldía de Barcelona dediquen la víspera de las elecciones a hacer el bobo para las fotos de la prensa impresa, las consabidas portadas de grupo con los candidatos dándolo todo.

Esta vez les han metido en una fuente, montado en bicicleta y plantado en la plaza de Sant Jaume y en el Saló de Cent. Patético. Ni siquiera la juvenil y subversiva CUP se niega a la pantomima. Es establishment. La estampa de La Vanguardia con los candidatos chapoteando en la balsa del pabellón Mies van der Rohe resume la profunda confusión y zozobra del momento. Es el puro vandalismo con la excusa de una foto. ¿Qué le impide ahora a un gamberro hacer lo mismo? Hay un candidato que patalea en el agua con tanto entusiasmo que las salpicaduras casi le tapan la cara. En fin...

Al hilo de la constitución de las Cortes y la suspensión de los presos, Jesús Cacho se muestra absolutamente pesimista y desencantado en Voz Populi: "Estamos recogiendo la cosecha del entreguismo de Felipe y Aznar a Jordi Pujol, la irresponsabilidad del pirómano Zapatero (el drama de aquel 11-M que cambió para siempre el rumbo de la nave española) y la dejación criminal de los Marianos. Han sido tantos los esfuerzos de tanta gente por vaciar de contenido nuestra democracia, no sin antes haberla desplumado, que al final la han dejado en los huesos. Esto tiene difícil arreglo, porque el PSOE de Sánchez, el partido más importante de la izquierda, ya no está en el bloque constitucional. Revertir la situación, asunto que a muchos se antoja misión imposible a estas alturas, exigiría volver a recuperar para la causa constitucional a este PSOE podemizado hasta la náusea, lo que pasa por derrocar a quien se ha hecho con todo el poder en el socialismo, para, desde la mayoría formada por socialistas y “derechas”, poder abrir la Constitución e introducir los cambios pertinentes. No sería mucho pedir. Después de más de cien años de historia, el viejo PSOE de siempre, el PSOE de los Felipe, Guerra y Cía., le debe una, al menos una, a esta pobre España sempiternamente apaleada. Y va siendo hora de empezar a pagar la deuda".

Mario Vargas Llosa ilustra la portada de La Razón por una entrevista de Javier Ors en la que también se habla del Congreso. Y tampoco es optimista: 

–"En España se ha constituido el Congreso de los Diputados esta misma semana. Y nos ha dejado, si me permite decirlo así, unas cuantas anécdotas... ¿Qué le parece?

Portada de La Razón del domingo 26 de mayo

Portada de La Razón del domingo 26 de mayo

Portada de La Razón del domingo 26 de mayo

–El Congreso de los Diputados expresa una diversidad que es muy real. Hay una división política hoy en día, y muy grande, en España. Yo diría que es lamentable, porque el bipartidismo ha traído enormes beneficios a España, pero la realidad actual es que el bipartidismo no existe y lo que existen son muchas fuerzas y muy controvertidas. Aunque lo más grave en el caso de España, para mí, es el rebrote de estos nacionalismos. Creo que en España los nacionalismos son un grave peligro, no únicamente porque amenaza la unidad del país, que es el más antiguo de Europa, sino porque pueden acabar con la democracia. Son una amenaza, tanto en la izquierda como en la derecha. Los demócratas tienen que movilizarse y hacer frente a este riesgo. El nacionalismo es una realidad que está entre nosotros y si dejamos que se desbande y se propague y consiga sus fines, el resultado no será solo la desaparición de la integridad del país, sino también la democracia, que, y esto hay que afirmarlo de una forma categórica, ha traído enormes beneficios a España en estos últimos cuarenta años".

Hay un cierto aire de fin de era en Europa. Los dinamiteros y pirómanos contemplan satisfechos la destrucción del continente. Escribe John Carlin en La Vanguardia: "Lo más repelente de todo esto es que gente como Farage y Johnson y la mayoría de sus correligionarios en el mundo político no sufrirán las consecuencias económicas de ningún Brexit. Ellos y sus familias están forrados. En algunos sonados casos, empresarios que financiaron la campaña del referéndum por el Brexit han tomado la precaución de trasladar sus negocios a Irlanda o Singapur. (...) La idea que se ha solidificado en las mentes del público brexitero es que ellos son los patriotas y los demás, los que quieren permanecer dentro de la Unión Europea, o incluso simplemente los que piden un segundo referéndum, son unos traidores. No son ingleses de verdad. Igual que en el léxico nacionalpopulista que da la vuelta al mundo ciertos estadounidenses o mexicanos o argentinos o catalanes tampoco son de verdad".

Fútbol político. Copa del Rey. Pitos y aplausos al himno y estupor en el barcelonismo. El Valencia se llevó el título por 2-1. “Messi está solo”, titula el Sport. “Otro golpe”, sentencia El Mundo Deportivo. Valverde pende de un hilo. José Antich pide su cabeza en El Nacional. Y la de la directiva también. Todos a la calle, exige: "La història recent del club és bastant inapel·lable: els èxits més importants han arribat de la mà de presidents que entenien que el Barça era més que un club, no un club més. Però també amb entrenadors i jugadors compromesos amb una idea de club i de joc però també amb el país, amb les seves persones, amb els seus símbols, amb la seva llengua i amb la seva cultura. No deixa de ser cridaner en aquest aspecte que Pep Guardiola llueixi sovint a Manchester un llaç groc de suport als presos polítics i que al Camp Nou això sigui impossible de veure. Certament, una clara disfunció entre el que pensa una part molt important de la grada i els seus representants públics".