El Gobierno ha perdido la inocencia. Ya no va con un cirio en la mano en materia migratoria sino con la porra. Ni cien días han pasado desde el cambio de Ejecutivo y Pedro Sánchez ha interpretado todos los papeles con los sin papeles, del rescate en alta mar a las expulsiones en caliente. Tanto la izquierda como la derecha carecen de un discurso coherente sobre el asunto. Van a remolque de las circunstancias, entre el realismo sucio y el humanitarismo de pacotilla, así que donde antes había inocentes que se juegan la vida por pan y futuro ahora hay peligrosos guerrilleros (La Razón).
De acoger a detener (El País). Mano dura y discurso autoritario. Tolerancia cero con los que salten a huevo. Del texto del diario de Prisa: "Los 10 detenidos están acusados de pertenencia a organización criminal, atentado contra agentes de la autoridad y lesiones. El primero de estos delitos está penado con hasta ocho años de cárcel. La investigación ha sido dirigida por el titular del Juzgado de Instrucción 5 de Ceuta, que ha declarado el secreto de sumario".
No deja de ser una buena señal el retorno de las pateras a las playas de Cádiz. Los pobres de solemnidad quieren entrar en Europa. Huyen del hambre, como en Venezuela. De El Mundo: "En concreto y según la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida, "seis de cada 10 venezolanos han perdido aproximadamente 11 kilogramos de peso en el último año [2017] por el hambre", y si se atiende a la encuesta de 2016, siete de cada 10 personas adelgazaron una media cercana a los nueve kilos. Pero hay más. En 2017, nueve de cada 10 venezolanos no podía pagar su alimentación diaria y "aproximadamente 8,2 millones [en un país de 32,5 millones de habitantes] ingirieron dos o menos comidas al día"".
Para ilustrar este fenómeno valgan algunos datos del libro de Joan de Déu Domènech La batalla de l'ou. De quan passàven gana (1936-1939), editado por Pòrtic: "El doctor Trueta va passar dels 75 als 62 quilos: 13 quilos de menys en tres anys. Aurora Bertrana, l'estiu de 1938 n'havia perdut 14. Semblen dades de dietètica i de programes contra l'obesitat, però quan se sap que Carmen Villavecchia, la dona de Maurici Serrahima, va perdre 11 quilos, en passar dels 50 als 39, s'entén que hi ha una crisis de fam i que s'ha arribat als límits de la supervivència".
Los países limítrofes cierran fronteras ante la avalancha de desesperados. En el estado con más reservas de petróleo del mundo no queda pan. Atrás quedan los tiempos en que los asesores de Podemos cobraban en euros.
Sánchez está de gira iberoamericana. Ha cruzado el charco para hablar de política nacional. En La Vanguardia advierten que "Sánchez no pactará un referéndum aunque le cueste los presupuestos". Vaya por Dios. Este Sánchez no es lo que parecía. Del texto del diario de Godó: "Consciente de que el clima se va a enrarecer en Catalunya este otoño, Sánchez quiso marcar desde Chile el campo de juego en el que piensa moverse, en el que no entra ninguna discusión sobre un eventual referéndum. En este mandato no va a haber ni esbozo de reforma constitucional, ni siquiera discusión sobre la financiación autonómica. Lo que pretende Sánchez es mostrar su disposición a mejorar la relación con Catalunya siempre dentro de los márgenes legales vigentes".
El choque ya ha empezado. La investigación de Fiscalía sobre las identificaciones a ciudadanos que retiran propaganda y la defensa del juez Llarena parecen mostrar a las claras que Sánchez ha interiorizado ya que es imposible entenderse con los nacionalistas catalanes de la república o la república.
El soberanismo no ha cambiado de chip. Gobernar es lo de menos, y más una autonomía. Torra, Artadi, Aragonès y el resto no han pegado un palo al agua en materia ejecutiva. Más de cien días de torrismo y sólo dos medidas: cerrar el Parlament y vender leche cruda. Eso sí, en el combate contra el fascismo, a brazo partido, aunque si hoy es miércoles, ayer dijo Artadi que, en realidad, todo es una anécdota.
Entrevista al presidente contingente en Vilaweb, que titula así: "Veig l'horitzó net, veig que ens en sortim". Hace dos días, Torra y Puigdemont veían nubes negras y ya no. Pura ciclotimia. De la pieza se desprende que el soberanismo cree que el 80% de los catalanes son antimonárquicos, antiguardias y proconsultas. Ahí va una muestra de pensamiento mágico:
"-- Fins on hem d’estar disposats a anar per aconseguir la independència?
-- Els pobles que volen ser lliures normalment s’exigeixen un respecte mínim a si mateixos. Aquest respecte implica defensar amb totes les conseqüències la seva llibertat. Aquesta és la clau de tots els pobles que han assolit la llibertat. Hem de ser conscients que ens trobem dins una causa general contra l’independentisme que provoca l’estat espanyol. Hem de tenir molt present aquesta situació d’excepcionalitat i hem de ser capaços de posar tot l’èmfasi, tota la mobilització, tota l’energia a favor dels drets civils, els drets socials i els drets nacionals del país. Les enquestes ens donen uns resultats molt interessants: un 80% és favorable al referèndum, un 80% va contra la repressió i un 80% no sent la monarquia com una institució pròpia. Aquestes dades ens donen una imatge del país que hem de saber mirar i treballar aquests mesos vinents."
En el plano municipal, El Periódico resalta que "las ratas vuelven a aflorar en Barcelona tras eliminar el refuerzo antiplagas". Colau, si estás ahí, manifiéstate.
29 de agosto, santoral: Memoria del martirio de Juan Bautista, Mederico y Sabina de Roma.