Torpedos demoscópicos en la flotación de Rajoy
La encuesta del 'ABC' ratifica la de 'El País'. Ciudadanos, en la espuma de la cresta. 'La Vanguardia' predice la extinción del artículo 155
15 enero, 2018 09:06El bipartidismo se tambalea en las encuestas. En este instante procesal, un ciclón naranja azota al PP y al PSOE mientras Podemos se hunde en la incongruencia del efebo Iglesias. Ciudadanos arrasa, se encarama en lo alto de los sondeos. Rajoy, sin embargo, no siente ningún aliento en su cogote, bien porque anda rápido o, a mayor abundamiento, porque no lee más periódicos que los deportivos.
Cada uno es libre de perder su tiempo como quiera y al presidente del Gobierno le inquieta más la sequía goleadora de Cristiano que los nuevos indicios demoscópicos sobre el cataclismo popular ya ratificados en las urnas de Cataluña. Templa y manda como los toreros de antaño en una brega de la que destaca la gestión de la economía, los números negros y los rojos. Lo demás es circunstancial e imprevisible, de sustancia fenoménica y meteorológica.
Sigue: "Sus 86-90 diputados serían, en todo caso, casi el triple de los que tiene ahora mismo, y le convertirían de forma automática en árbitro de la política española. En su mano estaría pactar con el PP o el PSOE, y elegir el color del nuevo Gobierno. Los dos partidos tradicionales solo podrían mirar a Ciudadanos si quieren formar Gobierno, a no ser que se pusieran de acuerdo entre ellos, una hipótesis que en España, al contrario de otros países como Alemania, ha sido completamente irrealizable hasta ahora".
El caso de Ciudadanos es objeto del análisis de José María Marco en La Razón: "Una de las novedades de Cs es que no se sabe si clasificarlo de izquierdas o de derechas, siendo liberales en lo moral y cultural, y más conservadores (socialdemócratas, aunque con matices) en lo económico. Antes de que Macron lo elevara al rango de doctrina política, en Cs ya practicaban el famoso «al mismo tiempo» que permitió al primero dinamitar los dos grandes partidos franceses. Así se entiende mejor la estrategia de apoyar gobiernos del PP (Madrid) y del PSOE (Andalucía). Además, se postula como garantía de estabilidad y si la situación llega al enfrentamiento, como en Cataluña, recoge el voto «útil» contra la amenaza, en este caso el nacionalismo".
En El País, Rubén Amón centra su texto en en la contraparte popular y el tapón directivo: "Todo el esfuerzo de renovación que intenta el PP en sus personalidades y órganos, se resiente de la elefantiasis marianista, más todavía cuando el líder del partido ejerce el cargo desde el presidencialismo y la purga de cualquier debate interno. Ni siquiera en una situación de emergencia como la contemporánea han aparecido discrepancias ni cuestionamientos, con una sola y martilleante excepción de ultratumba: José María Aznar. (...) Mariano Rajoy se observa a sí mismo como sucesor de Mariano Rajoy, quizá al precio de terminar sepultándose con su partido".
La Vanguardia saluda el tercer lunes del año con optimismo. Carmen del Riego firma un texto en el que se anticipa la extinción del 155 a la que la Generalitat disponga de ejecutivo: "Catalunya puede tener un nuevo presidente al finalizar este mes y otro Govern y, con él, el artículo 155 de la Constitución pasará a la historia. Será automático. Así lo prevé el acuerdo aprobado por el Senado y el real decreto aprobado por el Consejo de Ministros el 27 de octubre. No se necesita un decreto de la Moncloa que lo liquide, ni que el Senado acuerde el fin de su vigencia. La toma de posesión del Ejecutivo surgido de las elecciones del 21-D supondrá el fin de la intervención de las instituciones catalanas".
El artículo está sentenciado. Abunda la pieza: "Ni la formación de la Mesa del Parlament con una mayoría independentista, ni el hecho de que se intente forzar el reglamento con una posible investidura a distancia de Carles Puigdemont influirá en la vigencia de la aplicación del artículo 155, según aseguran fuentes gubernamentales a La Vanguardia. Si bien es cierto que el Gobierno central podría pedir una ampliación de la vigencia, pero esa hipótesis no está a día de hoy sobre la mesa".
También está visto para sentencia el caso Palau, del que han llovido ocho años. En El Mundo, Ángeles Escrivá traza la previa con una conversación con Joan Llinares, el gestor que abrió los cajones y las ventanas: "«El personaje central de esta historia, después de Jordi Pujol, es Artur Mas»; «Primero en Convergència se cobraba el 3% a través del Palau, pero después se cobraba el 4% y, cuando eso ocurrió, el conseller en cap era Artur Mas». Quien realiza estas afirmaciones con tanta seguridad que no ve necesario aportar matices es Joan Llinares, el funcionario de alto rango, miembro del cuerpo nacional de secretarios, interventores y tesoreros de la Administración local, que fue designado por el Ministerio de Cultura, la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona para dirigir el Palau después del expolio perpetrado por Fèlix Millet. Hoy la Audiencia de Barcelona notificará la sentencia del caso Palau".
Y párrafos después: "El ex director del Palau recuerda que fue el propio Millet quien reconoció ante el juez que el 3% de comisión acabó convirtiéndose en el 4%. «'Me pidieron más dinero', dijo, y el juez le preguntó: '¿Quiénes?, ¿Convergència?' y él respondió: 'Sí, claro'. Y en aquellos momentos Mas era conseller en cap. Y lo más llamativo es que seguían cobrando aunque en la Generalitat estuviera el tripartito, porque había quienes pagaban por si, en un futuro, CiU regresaba al Gobierno»".
Espectacular accidente en Trebisonda. Un avión procedente de Ankara se salió de la pista y quedó colgado de un acantilado. Los 162 ocupantes salieron ilesos del aeroplano. Es la fotografía de portada de los medios de papel.
15 de enero, santoral: Ableberto, Arnoldo, Arsenio, Bonito, Ita, Mauro, Malardo, Probo, Raquel, Secundina y Tarsicia.