La Fiscalía omite su propuesta de pruebas en el escrito para el juicio pese a estar obligada

La Fiscalía ha omitido en su escrito de acusación de rebelión y sedición a los líderes del procés la proposición de la prueba de que intentará valerse la acusación pública para el acto del juicio oral.

Los expertos consultados por este medio manifiestan su extrañeza ante este hecho que atribuyen a "un posible e incomprensible olvido" de la Fiscalía, dado que el articulo 656 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal obliga a las partes del juicio penal a presentar su propuesta de prueba con el escrito de acusación. La omisión significa que no se mencionan las pruebas documentales, la testifical o los peritajes sobre la malversación, entre otros. Este defecto, además, solo se podía subsanar durante el viernes, ya que es cuando terminaba el plazo de 5 días otorgado a las acusaciones.

Dos escritos diferentes

Gonzalo Boye, el abogado del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, ha sido el primero en observar este defecto y, a instancias de Crónica Global, especula con la posibilidad de que aparezcan en "los escritos que notifiquen a las defensas". No obstante, añade que esto significa "que no serán idénticos a los escritos que han hecho públicos este viernes".

Esto supone que el escrito que se ha dado a conocer no se corresponde con el presentado por la Fiscalía, y que el escrito completo no se conocerá hasta que haya sido trasladado a las defensas. "Entiendo que son más de 40 páginas de pruebas que proponen, simplemente que en lo hecho público este viernes no están incluidas", ha concluido el letrado de origen chileno. En este caso, se estaría ante dos escritos distintos, dado que el que se ha dado a conocer este viernes termina con la firma de los fiscales, es decir, tiene apariencia de no ser un extracto, sino un escrito de acusación completo.

Las defensas pueden invocar indefensión

Para reforzar su línea de defensa, los abogados podrían invocar indefensión por no haber podido conocer las pruebas del Fiscal cuando sea el momento de elaborar los escritos de la defensa. 

Esta anomalía ha sembrado confusión cuando se ha dado a conocer los escritos acusatorios y todo apunta a que podría beneficiar a los acusados por rebelión y sedición.