Puigdemont y los exconsejeros del 'Govern' pueden coincidir, extrañamente, en estrategia con Ciudadanos / EFE

Puigdemont y los exconsejeros del 'Govern' pueden coincidir, extrañamente, en estrategia con Ciudadanos / EFE

Política

Todos los diputados encarcelados y en Bélgica entregan las credenciales

El intento de los diputados electos huidos en Bruselas por delegar el voto ha sido rechazado por los letrados, por lo que se igualan las partes en el Parlament

15 enero, 2018 18:31

Los tres diputados electos soberanistas que están en la cárcel y los cinco que están en Bruselas ya han presentado las credenciales expedidas por la Junta Electoral para ser diputados de pleno derecho en la legislatura que empieza el miércoles.

La última en hacerlo ha sido la consellera de Agricultura cesada, Meritxell Serret, que ha realizado el trámite ante la Cámara catalana este lunes. Con ella, han completado la misma operación los ochos diputados electos que se encuentran en circunstancias excepcionales: Oriol Junqueras, Joaquim Forn y Jordi Cuixart --en la cárcel--, y Carles Puigdemont, Lluís Puig, Clara Ponsatí y Toni Comín, en Bélgica.

Se impide delegar el voto

En paralelo, los letrados de la Cámara catalana han realizado un informe a petición de la presidenta saliente, Carme Forcadell, en el que han rechazado el voto delegado de los diputados electos huidos en Bruselas, del mismo modo que la posibilidad de investir a distancia a Puigdemont.

Se prevé que este informe se aborde en la reunión de la Mesa de la Diputación Permanente fijada para este martes a las 10.15 horas.

Mayoría fluctuante 

En el pleno de constitución del Parlament, fijado para este miércoles y que empezará a las 11 horas, se decidirá el presidente de la Cámara y los otros seis miembros de la Mesa, el órgano rector del Parlament.

El rechazo a la delegación del voto a estos ocho diputados hace variar las mayorías parlamentarias que arrojaron las elecciones catalanas del 21 de diciembre: 70 diputados independentistas por 65 diputados no independentistas.

Dando por descontado que los tres en la cárcel podrán votar pero los los cinco en Bruselas no, entonces las fuerzas quedarían absolutamente igualadas: 65 diputados independentistas contra 65 no independentistas.

En este segundo escenario ya no estaría tan clara la presidencia para los soberanistas, y los partidos que no son independentistas podrían tratar de buscar un candidato alternativo, aunque hasta ahora no han demostrado tener un candidato de consenso.