La asociación de alcaldes 'indepes', en sus horas más bajas: "No tenemos plan"

La Asociación de Municipios Independentistas (AMI) se encuentra en sus horas más bajas. El resultado de las últimas elecciones municipales y la división estratégica entre JxCat y ERC han afectado a la que es la hermana pequeña de la Assemblea Nacional de Catalunya (ANC) y Òmnium Cultural.

En municipios claves, como Sant Vicenç dels Horts, pueblo de Oriol Junqueras, o en Calafell, los respectivos gobiernos del PSC han optado por abandonar la entidad tras su victoria en los comicios del 26 de mayo. En otras localidades, como en Castelldefels, la decisión de borrarse ha procedido por orden judicial tras un recurso presentado por Societat Civil Catalana (SCC). En esta línea, el próximo ente que podría abandonar la AMI es la Diputación de Barcelona, como han pedido tanto PSC como PP.

Fondos opacos

Poco a poco, el constitucionalismo va reaccionando para que fondos públicos no se destinen a una entidad con fines partidistas y que, según el juez que dictó la sentencia de Castelldefels, exceden el ámbito de actuación municipal al trabajar a favor de la independencia de Cataluña.

Con la marcha de la AMI de algunos municipios y el fracaso de la hoja de ruta independentista, la entidad ha perdido fuelle. Cuando desde este medio se preguntó por las cuotas que se pagaban para formar parte de la entidad, se limitaron a informar de la cuota mínima (75,50 euros al año), pero no de la máxima. “El dinero se destina al funcionamiento ordinario de la entidad (equipo, campañas, asesoramiento a los municipios…)”, añadieron. La ley de transparencia impulsada por la Generalitat obliga a los ayuntamientos a publicar la liquidación de presupuestos en su web --donde se ve los gastos y subvenciones otorgadas--, pero en caso de que la liquidación sea a nivel de capítulos --y no de partida-- no es tarea fácil saber la cantidad exacta que se destina a la causa independentista de la AMI.

Sin iniciativa

Pero más allá de la cuestión pecuniaria y las acciones judiciales en su contra, a nivel político tampoco está en su momento más álgido. En la asamblea celebrada este viernes en Manresa --celebrada con seis meses de retraso-- han intentado frenar la racha negativa y tapar la discrepancia de criterios entre JxCat y ERC con el mantenimiento del statu quo: su actual presidente, Josep Maria Cervera (JxSí), continuará en el cargo hasta 2021 y le sucederá el alcalde de Ametlla de Mar (ERC), Josep Gasieni, actual vicepresidente primero.

Ante los 170 alcaldes que han asistido a la asamblea, el presidente ha admitido que “no tiene un gran plan para afrontar la sentencia” ni “para hacer efectiva la independencia”. “El único plan que tengo es el de sumar complicidades”, ha apostillado Cervera. Por su parte, el presidente del Parlament, Roger Torrent, y la portavoz del Govern, Meritxell Budó, les han instado a “tomar la iniciativa”. Una iniciativa perdida y que, por el momento, no dan síntomas de poder recuperar.