El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, durante la rueda de prensa posterior al Consell Executiu
Illa promete dejarse la piel por los presupuestos: "ERC es terriblemente exigente, pero yo también soy tozudo"
El presidente de la Generalitat hace un balance positivo del año, destaca los avances en vivienda, economía y empleo y defiende que las bases ya están sentadas para convertir 2026 en un año decisivo para el futuro de Cataluña
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El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha defendido este martes la solidez de su alianza con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), a la que ha definido como un socio “muy exigente, pero comprometido”, al tiempo que ha reafirmado su optimismo sobre la evolución de Cataluña y ha situado 2026 como un punto de inflexión positivo para el país.
En una rueda de prensa tras la reunión del Consell Executiu, Illa ha defendido que el territorio “ha avanzado” y que el Govern ha cumplido sus compromisos en un contexto marcado por la incertidumbre, y que trabaja para cerrar los presupuestos lo antes posible, vinculados al despliegue del nuevo modelo de financiación singular.
ERC: socios “exigentes”
Preguntado por la relación con ERC, socio clave de la legislatura, el presidente socialista ha apelado al comportamiento demostrado por los republicanos hasta ahora como socios parlamentarios para sentarse a negociar los presupuestos cuando llegue la propuesta de financiación singular por parte del Gobierno de Pedro Sánchez.
"ERC son muy exigentes, terriblemente exigentes, pero yo también soy tozudo”, ha respondido el president, defendiendo que el Govern ha avanzado en varios compromisos pactados con el partido de Oriol Junqueras en los acuerdos de investidura, como la ley del Estatuto del Municipio Rural, aprobada con una amplia mayoría, o el progreso en traspasos pendientes.
En este sentido, ha asegurado que Cataluña está “muy cerca” de concretar el nuevo modelo de financiación singular, otro de los compromisos centrales con los republicanos, y ha confiado en que pueda cerrarse durante las primeras semanas o meses de 2026. "En enero deben pasar cosas y pasarán cosas", en palabras del socialista.
Presupuestos para 2026
Illa también se ha referido al calendario de los presupuestos, reconociendo las dificultades de los tiempos parlamentarios y evitando concretar fechas, aunque ha insistido en que contar con nuevas cuentas es un objetivo prioritario del Govern. “El mejor presupuesto posible, lo antes posible”, ha resumido, subrayando que la negociación presupuestaria estará necesariamente vinculada al desarrollo del acuerdo de financiación. "El Govern se dejará la piel para tener unos presupuesto", ha subrayado.
Sobre las garantías de estabilidad, el president ha afirmado que su principal aval es el compromiso político de ERC. “Es un grupo muy exigente, que no ha renunciado a su proyecto político, pero que cumple cuando se cumplen los acuerdos”, ha señalado, defendiendo que esa exigencia forma parte del mandato que dejó la ciudadanía en las urnas. “Nuestra obligación es convertir la aritmética parlamentaria en un gobierno operativo, trabajar, cumplir los acuerdos y hacer avanzar el país”, ha concluido.
La vivienda, el eje central
Uno de los pilares del balance ha sido la política de vivienda, que Illa ha calificado como una prioridad absoluta. El president ha recordado la activación del plan para construir más de 100.000 inmuebles públicos dentro del objetivo global de 200.000, así como el impulso del plan de 50.000 viviendas de protección oficial. Además, ha destacado que ya hay suelo identificado para hasta 300.000 viviendas, siempre en coordinación con los ayuntamientos.
En este ámbito, Illa ha subrayado la aprobación de 1.377 créditos de emancipación para jóvenes catalanes, de los cuales 383 ya se han formalizado, y la ampliación del parque público con 3.092 viviendas adquiridas a grandes tenedores, la mayor operación de este tipo realizada por la Generalitat en un solo año. “Cada día hemos ganado 8,5 pisos públicos en Cataluña. Son hechos, no palabras”, ha remarcado.
Balances en positivo
En materia económica, el presidente ha destacado el fuerte crecimiento del PIB, con un 3,7% en 2024 y una previsión cercana al 3% para 2025, por encima de la media europea y en la franja alta del conjunto de España. Todos los sectores han mostrado avances, con especial dinamismo de la agricultura (8,8%), la construcción (4,7%) y los servicios (2,7%). Las exportaciones alcanzaron los 8.537 millones de euros en septiembre, un 5,9% más que el año anterior.
El mercado laboral también ha cerrado el año con cifras récord, según el Govern. Cataluña alcanzó en noviembre 3,69 millones de afiliados a la Seguridad Social, y el paro se situó en 321.336 personas, el nivel más bajo desde 2007. A ello se suma una inflación contenida, con un IPC del 2,6%, inferior a la media estatal, y una moderación del crecimiento del precio de la vivienda, el más bajo entre las comunidades autónomas.
En el ámbito de la seguridad, Illa ha señalado una reducción del 3,9% de los delitos entre enero y octubre de 2025, con 20.000 infracciones menos y un aumento de la eficacia policial.
Mirada optimista
Durante su intervención, el presidente ha situado estos resultados en un contexto internacional complejo, marcado por conflictos armados, el auge de los extremismos y los efectos del cambio climático. En este sentido, ha querido poner en valor la respuesta colectiva de la sociedad catalana ante emergencias recientes y ha agradecido la labor de los servidores públicos.
De cara a 2026, Illa ha defendido que el Govern seguirá impulsando inversiones estratégicas en infraestructuras, transición energética, movilidad sostenible, industria e innovación, con proyectos como la gigafactoría, la ampliación del aeropuerto, el despliegue del vehículo eléctrico, la mejora de Rodalies o las inversiones en regadíos y gestión del agua.
