Carga de un coche eléctrico controlada mediante una aplicación

Carga de un coche eléctrico controlada mediante una aplicación

Política

El Govern traza un plan de inversión con 20 medidas para impulsar el coche eléctrico en Cataluña

Los departamentos de Empresa i Treball, Economia i Finances y Territori, Habitatge i Transició Ecològica han trabajado en una batería de medidas para multiplicar por cinco el número de puntos de recarga

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El Govern impulsará el coche eléctrico con una batería de 20 medidas que se implantarán en los próximos cinco años. El objetivo es que antes de 2030 el 40% de las matriculaciones sean de vehículos eléctricos.

Para ello, los departamentos de Empresa i Treball, Economia i Finances y Territori, Habitatge i Transició Ecològica han elaborado conjuntamente un plan con seis objetivos estratégicos y cinco ejes de actuación, según fuentes de la Generalitat. Todas las medidas y el importe económico desembolsado se detallarán en los próximos días.

Objetivo: aumentar el número de puntos de recarga

Actualmente, sólo el 14% de los coches catalanes que se compran son eléctricos, seis puntos menos que la media europea y 24 por debajo del objetivo planificado para dentro de cinco años.

Para impulsar el coche eléctrico, es primordial incrementar el número de puntos públicos de recarga de coches. Hoy, en Cataluña sólo hay 9.000, y el objetivo del Govern es multiplicar esta cifra por cinco, hasta alcanzar los 45.000 en 2030.

Detalle de una 'electrolinera', punto de recarga de vehículos eléctricos, en Cerdanyola del Vallès

Detalle de una 'electrolinera', punto de recarga de vehículos eléctricos, en Cerdanyola del Vallès AMB

La idea es que cada 60 kilómetros de la red viaria troncal exista una estación de recarga de alta potencia.

Plan europeo

El proyecto se enmarca en un plan europeo de impulso a la energía verde. El objetivo de la UE es alcanzar antes de 2050 la neutralidad climática, con la consolidación del coche eléctrico como una de las prioridades más apremiantes.

Sin embargo, son numerosos los escollos que dificultan la puesta en marcha del plan. El primero es que el mercado del vehículo eléctrico está estancado, y en el último lustro ha crecido a un pobre ritmo del 3% anual.

Hay otros problemas. Los vehículos eléctricos son casi un 50% más caros que los de combustión y Cataluña tiene el peor crecimiento de PIB per cápita de toda España.

En un contexto donde las clases medias y los jóvenes cada vez pierden más poder adquisitivo frente a las generaciones precedentes, comprar un coche eléctrico es un esfuerzo demasiado grande para muchos catalanes.

A ello también hay que añadir la dependencia del litio para crear las baterías de los vehículos, una sustancia que la UE importa principalmente de su principal competidor en el mercado automovilístico: China. Este problema aumenta la incertidumbre en el sector.

La poderosa industria catalana del automóvil

Cataluña deberá hacer un esfuerzo extra para repensar esta transición habida cuenta de la importancia que tiene el automóvil de combustible convencional en su economía. 

El sector de la automoción catalán está compuesto por 325 empresas, el 22% del sector en España, con una facturación agregada de 14.730 millones de euros. Es el tercer sector industrial con más peso en la economía catalana.

Cada año se fabrican en la región 481.000 unidades de coches, y la mayoría de ellos son exportados al extranjero. Ello da ocupación a 35.000 personas, el 7,6% de la industria catalana.

Si a la industria de la fabricación de automóviles se le añaden las compañías de venta y reparación de vehículos, el sector alcanza unas cifras colosales, con más de 10.000 empresas.