Nuevo escándalo en el entorno de Carles Puigdemont. El auditor del Consell per la República ha detectado “posibles irregularidades” en los gastos realizados por Toni Comín, por valor de 15.530 euros y en calidad de vicepresidente de la organización. Concretamente, la polémica gira alrededor de un informe firmado por Miquel Verdaguer, uno de los responsables de la empresa Senior Auditing, sobre gastos relacionados con el alquiler de un apartamento y un vehículo en Bélgica. Además, Verdaguer también habla de problemas en pagos de multas de tránsito y retiradas de efectivo.
Según informa El Món, los gastos personales declarados por Comín no se pueden vincular a su causa política, porque el auditor considera que el dirigente fugado ya ha tenido ingresos por su condición de eurodiputado de Junts.
Rebelión contra una deriva autoritaria
Hace un año, treinta miembros de unos de los órganos de dirección del parlamento fake de Puigdemont firmaron una carta para denunciar la deriva autoritaria de Toni Comín.
El Consell per la República está formado por la Asamblea de Representantes, una suerte de parlamento paralelo, y el propio gobierno del Consell. La vocación de esta entidad es difundir el separatismo a nivel internacional.
En otro orden, sin dejar las luchas internas del independentismo, el mismo Comín ha reconocido , de forma indirecta, el fracaso del Procés. “En Europa hay dudas sobre la independencia de Cataluña”, expresó Comín desde Bélgica a través de una videoconferencia.
Dichas palabras llegaron pocas horas después de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea desestimara el recurso presentado por Carles Puigdemont y Toni Comín contra el Parlamento Europeo por no haberles reconocido inicialmente como eurodiputados tras las elecciones europeas de mayo de 2019 ni la inmunidad asociada.