El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha citado al presidente del Parlament, Josep Rull, y a los líderes de todos los grupos parlamentarios en una ronda de contactos el próximo 28 de octubre en el Palau de la Generalitat.
Las invitaciones van dirigidas a todas las formaciones, incluidas Vox y Aliança Catalana, a pesar del veto que mantiene el dirigente del PSC a la extrema derecha por sus postulados racistas y excluyentes.
Hablar sin llegar a acuerdos
Fuentes del Govern han justificado a este diario que la intención del president no es otra que "hablar" sin llegar a acuerdos con las formaciones lideradas por Ignacio Garriga y Sílvia Orriols.
Los socios preferentes del Govern socialista son ERC y los Comuns, formaciones que posibilitaron la investidura de Illa y con quienes el ejecutivo quiere sacar adelante los presupuestos de la Generalitat de 2025. Al tiempo que Junts complica enormemente mantener una buena relación al haber renunciado a liderar la oposición e instalarse en las trincheras.
Críticas por hacerlo "tarde"
Con estos encuentros, el president, investido el pasado 8 de agosto, dará continuidad a los contactos institucionales que ha venido manteniendo desde que accedió al cargo, indican las mismas fuentes.
Ya se ha reunido en las últimas semanas con expresidentes de la Generalitat como Quim Torra, José Montilla, Jordi Pujol y Artur Mas. También con el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y los presidentes de las cuatro diputaciones, además del rey Felipe VI.
La portavoz de Junts en el Parlament, Mònica Sales, ha criticado en redes sociales que Illa haya "necesitado más de tres meses para entender que debe hablar con todos los representantes de los catalanes, empezando por la segunda autoridad del país, y no sólo con los del PSOE".
"Llega tarde y es evidente que no se ha puesto a ello hasta que Junts lo hemos denunciado en el Parlament", ha añadido.