Una semana después de que Salvador Illa se comprometiera delante del Parlament de Catalunya a construir 50.000 viviendas de protección oficial para 2030, el Govern empieza a trazar el plan para lograr ese objetivo. Los primeros 20.000 pisos, destinados al alquiler social, podrían ser habitables entre 2027 y 2028.
Según ha detallado Sílvia Paneque, consellera de Habitatge, el primer paso que dará la Generalitat es "crear una reserva de solares públicos", es decir, terrenos de titularidad de ayuntamientos o privados, pero con certificación VPO (vivienda de protección oficial), que ya están "a disposición de construir, sin necesidad de modificaciones urbanísticas".
La también portavoz del Govern ha asegurado que, según los cálculos del Consell Executiu, si todos los solares que cumplen esta condición en Cataluña se ponen a disposición de la Generalitat, se podrá entregar un paquete de 20.000 pisos de alquiler social en el horizonte 2027-28. La convocatoria para elaborar esa reserva de solares se abrirá en febrero de 2025.