Alfred Bosch ya ha elegido a su target. El candidato de Foc Nou se lanza a por la militancia de ERC más radical e indignada con el pacto de investidura de Salvador Illa (PSC), a la que quiere seducir desmarcándose del contenido del acuerdo y alzando el tono en la carpeta nacionalista: "Si ganamos, pediremos a los socialistas que acepten la autodeterminación de Cataluña, y después veremos cómo votar".
El exconseller marca perfil así ante el congreso del 30 de noviembre, en el que la formación elegirá una nueva dirección tras el batacazo de las elecciones del 12 de mayo y en plena guerra sucia entre la facción del expresidente Oriol Junqueras, candidato de Militància Decidim, y la secretaria general en funciones Marta Rovira, que impulsa desde la sombra Nova Esquerra Nacional. Ambas listas, a priori, parten con ventaja.
"No habrá concierto económico"
En una entrevista en el programa Cafè d'Idees de La2 de Televisión Española, Bosch ha atizado a los socialistas por "tratar a todo un pueblo como a menores de edad" y ha recordado que "prácticamente la mitad de las bases votó en contra del acuerdo y la otra mitad no lo hizo muy convencida".
También ha censurado el pacto por no ser "creíble". Ha augurado que "no habrá concierto económico ni nada que se le parezca" y se ha referido a lo "caricaturesco" del punto que hace referencia a la oficialidad de selecciones deportivas catalanas: "¿Alguien se cree que el PSC vaya a implantarlas?".
Es por ello que ha acusado a la actual dirección de no "hablar claro" y de "no explicar realmente el propósito que hay tras el acuerdo" de investidura. Sobre este punto, ha censurado que la alianza entre republicanos y socialistas responda al "miedo" a una repetición electoral cuando "el modelo de ERC es de democracia radical: nosotros queremos las urnas". "Indignante", ha rematado.
El PSC, más cercano a Junts
Para encomendarse a los indignados, el extitular de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia de la Generalitat también ha jugado la carta de demonizar al PSC, al que ha situado "más cerca" de Junts, el rival directo de los republicanos en lo nacionalista.
"Podrían entenderse fácilmente con Junts en el ideario, no debería costarles demasiado", en palabras de Bosch, quien ha dicho que los socialistas son "un partido conservador". Si el Govern de Illa va sumando "incumplimientos", su candidatura se planteará "rectificar" la decisión de apoyar al Govern, al que critica por su defensa a la construcción de la B-40, la ampliación del aeropuerto o el "turismo masivo".
"Golpe de timón" para una ERC "a la deriva"
"ERC no parece ERC, va a la deriva y necesita un golpe de timón", ha denunciado, antes de recriminar a la dirección del partido que en los últimos años haya concedido "cheques en blanco a los socialistas" en las diferentes instituciones y se haya dejado arrebatar la reivindicación de la "república catalana" por Junts.
El exconseller también ha lamentado las "disputas internas" entre Rovira y Junqueras, así como la "guerra sucia" y la "cloaca" de la estructura B del partido, que impulsó campañas de falsa bandera y que "ataca la dignidad de ERC". "Nos incomoda muchísimo esta suciedad en el que era el partido de las manos limpias", ha dicho Bosch, que considera que Junqueras y Rovira "deben responder por esto".
Sobre Oriol Junqueras, en concreto, ha asegurado que ahora ya "no es la carta ganadora" de ERC, por lo que le ha recomendado "un paso al lado", sin descartar su posible retorno en el futuro.
Vilalta, fuera de las candidaturas
Quien no formará parte de ninguna lista en el próximo congreso es la portavoz del grupo parlamentario, Marta Vilalta. Lo ha anunciado la noche de este martes en una entrevista en Més324, en la que ha dicho que "es una decisión tomada hace tiempo" porque cree que debe haber una renovación en el partido.
Vilalta ha avanzado que a partir del 30 de noviembre se pondrá a disposición de la dirección de ERC y que, hasta entonces, estará "comprometida con las responsabilidades" que tiene actualmente como secretaria general adjunta.