A 24 horas de la Diada, la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, ha exigido a Carles Puigdemont y Oriol Junqueras que “den un paso” al lado. En este sentido, durante una entrevista en la Cadena SER, Forcadell asegura estar "enfadada con los egos en general" dentro del partido, y ha pedido una renovación. Sin dejar el ámbito estrictamente de ERC, la antigua dirigente de la cámara catalana ha negado cualquier posibilidad de que ella presida el partido a partir del congreso del 30 de noviembre, y ha añadido que, aunque no ha tenido un papel "relevante" en la dirección de ERC en los últimos años, sí que ha estado cerca, por lo que “se siente” responsable de los resultados electorales.
Sobre los mensajes privados que se filtraron de la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que eran reacciones a cuando aparecieron los carteles difamatorios contra los hermanos Maragall, Forcadell ha expresado que siente "mucha tristeza, mucha rabia, mucha decepción, por muchos motivos". Ha subrayado que las filtraciones "no buscan la verdad" porque, a su juicio, la vía propicia para investigar los carteles difamatorios era llevar los mensajes a la comisión de garantías de ERC y no a los medios de comunicación.
Enmarcando los mensajes dentro del proceso congresual de ERC, Forcadell ha avisado de que la situación actual en el partido se parece a la del congreso de 2008, cuando también se presentaron cuatro candidaturas para disputar la dirección. La dirigente indultada también ha remarcado que tener cuatro candidaturas puede ser bueno si se respetan las reglas, pero que las posiciones actuales dentro de la formación republicana están "absolutamente polarizados, absolutamente unos en contra de otros y peleados".