Las entidades independentistas celebrarán la Diada del 11 de septiembre de 2024 con convocatorias repartidas por Cataluña. Es la apuesta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, entre otras, para camuflar una evidente desmovilización del secesionismo que difícilmente permitiría repetir estampas multitudinarias como las de años anteriores con Barcelona como punto de encuentro.
De hecho, Lluís Llach ha tratado de arengar a los nacionalistas con su discurso. "Debemos de estar todos, no esperéis que os vengamos a buscar. Volvamos a las calles con determinación y unidad", ha proferido el presidente de la ANC, en el acto de presentación del programa en el Arco del Triunfo de la capital catalana este miércoles.
Descentralizada
La movilización será "descentralizada", aunque con "epicentro en Barcelona", donde los dirigentes de las entidades independentistas harán sus intervenciones. La convocatoria arrancará a las 16 horas en la Estación de Francia y se dirigirá hacia el Arco del Triunfo, en el que tendrá lugar el "acto político unitario".
En paralelo, habrá movilizaciones en Tarragona, Girona, Lleida y Tortosa, al sur de Cataluña. "Hacer una movilización descentralizada nos ayudará a reactivar todo el país. Debemos de ser mucha gente en todas partes", ha pedido la coordinadora de la comisión de movilización de la ANC, Elisenda Romeu.
Cada convocatoria llevará el lema "Volvamos a las calles: Independencia" y servirá para "denunciar los agravios" que dicen sufrir "por el hecho de pertenecer al Estado español, estrechamente vinculados al expolio fiscal", ha añadido.
Reconocen la desmovilización
Las palabras de Llach y Romeu evidencian lo que es un secreto a voces, que el independentismo ha perdido gran parte de su capacidad de convocatoria. Muestra de ello también es el pinchazo en la que debía ser su primera gran movilización como nuevo presidente de la entidad.
Precisamente el dirigente de Òmnium, Xavier Antich, se ha pronunciado en el mismo sentido. Ha defendido hacer "un frente común para volver a demostrar que el independentismo es fuerte, transversal, inteligente y maduro estratégicamente".
Puigdemont está detrás
Además de ANC y Òmnium, constan como organizadores la Associació de Municipis per la Independència (AMI), el sindicato Intersindical, el Centre Internacional Escarré per a les Minories Ètniques (CIEMEN) y el Consell de la República. Esta última está presidida por el expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont.
De hecho, el también líder de Junts recibió a principios de mes a representantes de las principales entidades en Waterloo, Bruselas, donde reside y desde donde opera su plataforma independentista. Y tampoco son ningún secreto sus movimientos para tratar de influir mediante Lluís Llach en la política catalana en plenas negociaciones de ERC para investir a Salvador Illa president a principios de agosto.