ERC intentó poner en valor su obra de Govern durante la campaña electoral de las elecciones autonómicas del 12 de mayo. Lo plasmó negro sobre blanco con el mensaje-fuerza Ha valido la pena... en los mitines. El electorado le ha propinado un revés: los republicanos del aún presidente catalán Pere Aragonès (ERC) han caído ocho puntos y trece diputados desde 2021, hasta los 20 diputados --desde los 33 de tres años atrás-- pero se llevan un consuelo: tendrán la llave de la gobernabilidad en Cataluña.
Es lo que se desprende de los datos del escrutinio de los comicios regionales catalanes de hoy domingo, que dejan a Esquerra como los grandes perdedores de la jornada. Los independentistas pierden más apoyos que ningún otro partido y, sobre todo, quedan muy lejos de Junts, sus rivales directos: en efecto, ERC gana 20 actas al Parlamento catalán, y se queda a dieciséis de los 36 logrados por los del expresident Carles Puigdemont.
Caída en todas las provincias
Según los datos del recuento de la cita electora, ERC pierde siete diputados en Barcelona; dos en Girona --donde pasa a ser tercera fuerza detrás del PSC--; dos en Tarragona --tercera fuerza tras Junts-- y dos en Lleida.
Entre fuerzas independentistas, los de Aragonès y Oriol Junqueras en la presidencia del partido son los que más caen: la CUP cede tres puntos porcentuales desde 2021 y se queda solo con cuatro actas; Junts se estabiliza al alza (+1,21%) y los ultras de Aliança Catalana entra en el hemiciclo regional (+3,81% y tres electos).
Llave de la gobernabilidad
Eso sí, los 20 diputados de ERC podrían valer su peso en oro. Es así porque los resultados de las elecciones autonómicas de hoy dejan pocas combinaciones de pactos posibles. La más probable de todas es que el PSC, ganador de los comicios, sume los votos de los republicanos para investir a Salvador Illa como president de la Generalitat, además de los de alguna otra fuerza.
Cabe recordar que el bloque independentista, que ha gobernado la última legislatura en Cataluña, apenas suma 60 actas, a ocho de la mayoría absoluta. Es la primera vez de las últimas cuatro elecciones autonómicas que los secesionistas no suman.
Los catalanes rechazan una gestión polémica
Pero es que los resultados de los nacionalistas de la calle Calàbria de Barcelona tienen una lectura propia. El electorado ha dado la espalda a la gestión desempeñada por ERC en los últimos tres años. Ni en coalición con Junts ni tras la salida de los neoconvergentes del Govern en 2022.
Y eso que los republicanos, ya sea con los de Puigdemont o en solitario, han retenido consejerías clave, como Educación, Interior o Salut. No les ha bastado. La idea-fuerza de Ha valido la pena, que en campaña Aragonès acompañó de "...más mossos, más profesores, más sanitarios", no ha calado. La ciudadanía ha dado la espalda a una gestión trufada de controversias.
Mossos y prisiones
Y es que la singladura de ERC al frente del Govern autonómico, donde no había estado desde 2011, ha estado aquejada de una sucesión de crisis. Cabe recordar que a horas de las elecciones, el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ascendió a mayor de los Mossos d'Esquadra al nacionalista Eduard Sallent por la vía exprés. Eso después de que el candidato del PSC, Salvador Illa, dejara claro que el anterior major que cesó, precisamente, Elena, Josep Lluís Trapero, sería su director general de la Policía.
En prisiones, una cartera compleja, el asesinato de una funcionaria a principios de año prendió un colosal conflicto laboral que aún dura.
Educación y sanidad
Hubo más polémicas. Otra de las lacerantes fue los catastróficos resultados de los alumnos catalanes en el informe PISA. O las huelgas en educación que se cobraron la cabeza del exconseller Josep Gonzàlez Cambray.
El ya 'exconseller' de Salud, Manel Balcells, en el Parlament
En el terreno de los funcionarios, la Generalitat organizó sus primeras oposiciones externalizadas de la historia y tuvieron que repetirse por el colapso. En el campo sanitario, el conseller Manel Balcells sorteó hasta 14 huelgas de médicos y sanitarios. Las pudo navegar a base de mejoras salariales y laborales, pero la incapacidad de aprobar los presupuestos de 2024, y la prórroga de los anteriores, lesionó los avances.
190.000 votos menos
Los problemas han calado entre el electorado. Los republicanos han cedido poco más de 190.000 votos desde las últimas elecciones autonómicas de 2021. Son la formación que más apoyos pierde, acusando la polarización política, que ha impulsado un poco a Junts, pero sobre todo al PSC, el gran ganador de la velada. Esa suerte de sandwich ha lastimado los votos a los republicanos.
Especialmente dolorosos para Esquerra son los resultados en Girona y Lleida, donde la fuerza de Aragonès y Junqueras pierde fuelle por encima de la media autonómica: 9,81% y 10,21%, por encima de los ocho puntos del global regional.
"Oposición"
Tras conocerse los resultados, el aún president Aragonès ha admitido los "malos resultados" de ERC en los comicios de hoy. Tras ello, el jefe del Ejecutivo ha situado a los republicanos en la "oposición" y ha apremiado a PSC y a Junts a "gestionar" la nueva etapa que se abre tras la cita electoral.
El también exdiputado ha comparecido flanqueado por Oriol Junqueras, presidente del partido, pero no por Marta Vilalta, secretaria general de ERC.