La ampliación del aeropuerto de Barcelona-El Prat ha sido una de las piedras en el zapato de Esquerra Republicana en la legislatura que llega a su fin. El Govern presidido por Pere Aragonès aparcó el proyecto y ha evitado posicionarse claramente sobre su plan para reforzar la infraestructura, un tema sensible para su electorado por las implicaciones medioambientales, aunque incluso entre los ecologistas que se oponen a esta inversión, existen voces dispuestas a valorarla si se acompaña de los debidos estudios científicos y recursos para preservar el patrimonio natural de la zona.
Hasta ahora, el Ejecutivo catalán se ha limitado a pasar de puntillas sobre la cuestión y, aunque algunos dirigentes republicanos se han mostrado a favor de impulsar el hub intercontinental, el partido se ha resistido a emitir una postura tan clara como la de la CUP o comunes, completamente contrarios a la ampliación, o la de Junts, PP o Cs, nítidamente favorables. Aun así, ERC, que aspira a perfilarse como business friendly sin perder el apoyo de sus bases de izquierdas, ha iniciado una discreta ronda de contactos para abordar el asunto a un mes de las elecciones autonómicas del 12 de mayo.
Ronda de contactos
Al ser consultados por Crónica Global, los portavoces oficiales del partido en el Govern no han aclarado cuál es la posición concreta de los republicanos para el aeropuerto, ni si se va a hacer algún anuncio antes de los comicios. Sin embargo, fuentes del circuito empresarial señalan que responsables políticos de ERC han citado a una decena de entidades para plantearles su propuesta para El Prat.
Estos encuentros serán de perfil bajo y con los representantes convocados de uno en uno, sin grandes actos públicos. En el empresariado catalán existe cierto malestar con el hecho de que se haya invitado a entidades como el Colegio de Economistas de Cataluña o el sindicato agrario Unió de Pagesos, pero no a la principal patronal catalana, Foment del Treball, que lleva meses trabajando en una comisión con numerosos expertos de varias disciplinas las diferentes alternativas para aumentar la capacidad de vuelos de largo radio del aeropuerto barcelonés.
Críticas al electoralismo
Desde este entorno económico se considera que preocuparse de esta temática a cuatro semanas de que Cataluña vaya a las urnas y sin consultar con una amplia variedad de voces resulta electoralista y precipitado. Una actitud que se equipara a la que se ha seguido "con la financiación o el referéndum".
Aunque este modo de proceder puede irritar a parte del empresariado, también puede cumplir el objetivo de movilizar al electorado de ERC, más desmotivado -después de tres años de desgaste gubernamental- que los posconvergentes de Carles Puigdemont. Un hastío que los de Aragonès han tratado de frenar lanzando propuestas grandilocuentes desde el Govern que, al menos, han conseguido protagonizar el debate público por primera vez en unos meses marcados por la incapacidad de los republicanos para controlar la actualidad informativa.
ERC intenta marcar agenda
Desde este punto de vista, los anuncios por parte de Aragonès con respecto a su posición sobre temas como el cupo catalán o un referéndum acordado de "autodeterminación" sí han conseguido copar portadas. La mejora de las infraestructuras -en particular, el aeropuerto de El Prat y el traspaso de Rodalies ya pactado con el PSOE- podría ser el tema por el que apueste Esquerra en las próximas semanas como parte de esta arriesgada estrategia electoral.
Por el momento, los principales representantes públicos de ERC no han expresado un sí o no rotundo sobre la ampliación aeroportuaria, más allá del rechazo a la fórmula que planteó inicialmente Aena. Aún así, han considerado positivo que el debate se enriquezca con nuevas vías como la que plantearon el ingeniero Joaquim Coello y los economistas Andreu Mas-Colell y Guillem López Casasnovas: construir una nueva pista sobre el mar Mediterráneo.
Las fuentes consultadas en el sector turístico admiten que este proyecto está rodeado de "polémica", aunque tachan de "muy importante" la ampliación para conseguir más oferta de vuelos de largo radio una vez se ha constatado la recuperación de los vuelos procedentes de Asia o el fuerte crecimiento de los que conectan la capital catalana con ciudades de Estados Unidos. Un camino que piden continuar para que Barcelona pueda transicionar del modelo turístico de la masificación y el low cost hacia un destino bien posicionado para los viajeros con intereses culturales y alto nivel adquisitivo.