El fichaje del meteorólogo Tomàs Molina, el carismático hombre del tiempo de TV3, por ERC para las elecciones europeas ha generado un seísmo en la cadena pública. El consejo profesional del canal autonómico lamenta este movimiento, pues "daña" su "imagen de independencia periodística".
En un comunicado este miércoles, el consejo profesional admite que el posicionamiento de Molina --que dejará de salir en pantalla, pero seguirá trabajando en TV3-- ha generado "malestar en la redacción" por la repercusión que pueda tener en su credibilidad.
Los principios de la CCMA
"Decisiones como esta contribuyen a asociarnos a determinados postulados políticos y de partidos cuando los principios de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA) establecen claramente que 'la producción y difusión de contenidos es independiente del poder político y económico y está guiada por criterios profesionales y de servicio público'", escriben.
Y añaden que, "cuando una cara visible de TV3 se pone al servicio de un partido, eclipsa el buen trabajo que los profesionales de informativos tratan de hacer a diario precisamente para preservar esta distancia". En este sentido, esperan que "la cobertura de campaña" que se le haga "sea la misma que se le haría a cualquier otro candidato".
Otro movimiento sospechoso
En esas líneas, aprovechan para solicitar a la CCMA que "aclare" en qué condiciones deben volver los profesionales que hayan pasado por el ámbito político para que su reincorporación "no dañe los valores de independencia periodística de la casa".
Pero no solo del fichaje de Molina por ERC se queja el consejo profesional. En la misma nota, lamenta que la CCMA tiene la intención de trasladar las delegaciones de TV3 y Catalunya Ràdio de Girona a un complejo de la Generalitat donde se encuentran la Delegación del Govern y múltiples consejerías. Este cambio de sede también "pone en cuestión la independencia de los medios públicos".