La Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) vuelve a alinearse con las consignas y postulados del nacionalismo gobernante en Cataluña. Tras haberse sumado a las campañas de apoyo a los dirigentes procesados y encarcelados por el procés en los últimos años, esta institución pública de Enseñanza Superior parece coincidir ahora con el nuevo caballo de batalla de la Generalitat: imponer el monolingüismo en catalán en todos los ámbitos posibles de la sociedad, ya sea a nivel público o privado.
En concreto, la UAB ha anunciado la creación de un taller denominado "No me racialices: háblame en catalán", mediante el cual, utilizando el antirracismo como pretexto, invita a los catalanohablantes a no cambiar de idioma con otros alumnos que no se expresen en dicha lengua.
Gratuito y 1,5 créditos ECTS
La UAB ofrece el curso en cuestión a todo su alumnado de grado de forma gratuita. Sus clases se impartirán del 29 de febrero al 21 de marzo en la Facultad de Traducción e Interpretación y su duración total será de 14 horas presenciales más otras 21 horas de "trabajo autónomo".
Este centro universitario recompensa además académicamente a quienes participen en el mismo otorgando 1,5 créditos ECTS a quienes lo cursen y superen.
"Beneficios de mantener la lengua propia"
Según explica la UAB en su página web, "el objetivo es concienciar a los y las catalanohablantes de las razones que les llevan a utilizar una lengua determinada en las conversaciones diarias y los beneficios que se derivan de mantener la lengua propia cuando los interlocutores, por ejemplo, están aprendiendo catalán".
"Por otra parte, esta actividad permitirá a los no catalanohablantes conocer los motivos socioculturales que mueven a los catalanohablantes a actuar lingüísticamente de una manera determinada", añade este centro universitario.
"Interlocutores que perciben que no son de su comunidad"
En este punto, el comunicado de la UAB echa mano de eufemismos para, sin citarlos de forma expresa, referirse al catalán como "lengua propia" y al castellano como "lengua mayoritaria", y recurre a un supuesto antirracismo para argumentar su rechazo a cambiar a esta última.
"Los catalanohablantes, cuando interactúan con interlocutores que perciben que no pertenecen a su comunidad, tienden a cambiar de lengua y sustituyen la propia por la lengua mayoritaria. Este hecho es visto de manera negativa por muchos de sus interlocutores, ya que se sienten excluidos de la comunidad donde viven. Al mismo tiempo, cuando los no catalanohablantes no encuentran espacios donde utilizar el catalán, mengua su capacidad de aprender la lengua", esgrime como argumento la nota de la UAB.
"Aplicar en las interacciones entre hablantes"
Según esta universidad, esta nueva actividad que ofrece de forma gratuita al alumnado "profundizará en el concepto de derechos lingüísticos y en cómo se puede aplicar a las interacciones entre hablantes".
De este modo, "se analizarán las conductas lingüísticas propias y se hablará de cuestiones como las lenguas minorizadas en un entorno multilingüe, las percepciones de alteridad, los prejuicios lingüísticos, los derechos lingüísticos en diferentes ámbitos como la universidad o la Administración pública, la normativa de la Unión Europea en materia lingüística, etcétera".
Alegato contra el bilingüismo en la inauguración del curso pasado
Este tipo de coincidencias con los postulados de los mandatarios de la Generalitat no son nuevos en las universidades públicas catalanas. Ya al inicio del curso pasado, por ejemplo, la UAB eligió al escritor nacionalista Màrius Serra para su discurso inaugural, el cual estuvo trufado de alegatos en contra del bilingüismo vehicular en la enseñanza. Un hecho que se sumaba a otros, como la invitación de este mismo centro educativo a sus estudiantes a utilizar su canal de comunicación interno Opina UAB para tramitar sus quejas por el uso del español en clases previstas en catalán, o la cesión de uno de sus recintos para un seminario de Plataforma per la Llengua contra el “supremacismo castellano”.
La polémica de Màrius Serra se produjo pocos días después de que la UAB pusiera en marcha su campaña “No em toquis la llengua” -“No me toques la lengua”--, con la cual este centro pretende, según sus responsables, “poner de manifiesto su compromiso con la presencia de la lengua catalana en la docencia y la investigación”. Una iniciativa que, casualmente, coincidía en el tiempo con el rotundo rechazo del Govern a cumplir las sentencias judiciales firmes que instan a impartir al menos un 25% de las clases en castellano en la enseñanza no universitaria pública de la autonomía, monolingüe y obligatoria en catalán desde hace tres décadas. Un rechazo que ese mismo verano de 2022 compartieron, vía comunicado conjunto, todos los rectores de las universidades públicas de la autonomía, entre ellos el de la UAB, Javier Lafuente.