A pesar de los vaivenes de Carles Puigdemont, José Luis Rodríguez Zapatero está convencido de que "va a haber ley de amnistía". "No tengo ninguna duda, porque antes o después se tenía que producir", ha asegurado este jueves el expresidente del Gobierno, que también se ha mostrado partidario de "avanzar en el reconocimiento de la identidad nacional" de Cataluña en esta legislatura.

El expresidente socialista ha expresado su visión sobre temas como la amnistía y los retos políticos y económicos del país en una conferencia en Barcelona organizada por La Vanguardia, en la que ha defendido "la unidad", pero también el "reconocimiento de la diversidad", incluyendo la "plurinacionalidad". De hecho, ha señalado que "la unidad solo es posible si se reconoce la singularidad", entendida no como un privilegio sino como una realidad histórica y diversa.

Negociar con "responsabilidad"

Sobre las negociaciones, por ahora encalladas, en torno a la amnistía, Zapatero ha manifestado que "la sociedad catalana está deseando que haya un acuerdo, que haya una amnistíam" y la atención política pueda finalmente centrarse en "otro tema". Y ha añadido que también en el conjunto de España acabará aceptándose la polémica norma: "Aunque digan las encuestas, aunque el PP salga a las calles... no está bien visto esto políticamente, pero cuando pase el tiempo, la gente dirá 'había que hacerlo'", ha valorado.

"No creo que nadie, ni Junts ni el PSOE, estén en una relación de ver quién humilla a quién", ha asegurado el expresidente, que ha alertado de que "en la historia no queda nada de eso y ha apelado a la "responsabilidad". "Ambas formaciones políticas saben muy bien el momento de responsabilidad que tienen. Lo sabe el presidente Puigdemont y lo sabe el presidente Sánchez", ha sentenciado.

"No se puede hablar de terrorismo"

A pesar de declararse partidario de perdonar a los encausados del procés, Zapatero ha admitido que "una ley de amnistía es técnicamente complicada". También ha hecho referencia, sin mencionar al juez Manuel García-Castellón, a los "movimientos judiciales" que han llegado "en paralelo" a las negociaciones políticas, aunque ha opinado que "se están produciendo más en el azar que en la conspiración".

Sobre la inclusión o no de los delitos de terrorismo en la ley de amnistía, ha indicado que "cuando hablamos de independentismo, no se puede hablar de terrorismo", haciéndose eco de las palabras pronunciadas por su sucesor en la Moncloa, Pedro Sánchez. También ha revelado que su "admiración" por el presidente "ha ido creciendo", hasta el punto de declararse convencido de que "es un presidente llamado a resolver un gran problema que se originó en la etapa de Rajoy". Al PP también le ha reprochado que parece haber decidido "desentenderse de Cataluña".

El 'lawfare' puede terminar en fiscalía

Sin embargo, el expresidente ha evitado secundar las palabras de la vicepresidenta Teresa Ribera sobre la "implicación política" de los movimientos del juez García Castejón, unas declaraciones que fueron leídas por la oposición y parte de la magistratura como una acusación velada de prevaricación. Al ser preguntado por este asunto, se ha limitado a remarcar que "el 11M sí que fue un atentado terrorista" tras el cual "se impuso la verdad", "lo mismo" que cree que va a suceder en esta ocasión.

Tampoco se ha adherido a las tesis del ministro Óscar Puente sobre el lawfare. Zapatero se ha querido mostrar cauto, haciendo hincapié en que "va a haber dos comisiones de investigación" que serán las que se deberán pronunciar al respecto. Ha recordado que una comisión parlamentaria "puede hacer dos cosas en sus conclusiones", es decir, "proponer una reforma legislativa" o "trasladar documentación al fiscal para que actúe" cuando percibe "actuaciones incorrectas judicialmente".

Noticias relacionadas