Junts ya detecta a la ultra Sílvia Orriols como una amenaza. Y ha movilizado hasta a su figura más icónica: el expresident catalán fugado Carles Puigdemont. El huido ha loado hoy las "tradiciones" navideñas en plenas críticas de la alcaldesa de Ripoll (Girona) al Govern.
En un post en X --antes Twitter--, Puigdemont ha resaltado la "identidad de un pueblo" y las tradiciones de sus "ancestros" por Navidad. Esos usos son, según él, la "escudella, el tió, el pesebre, desear Bon Nadal, celebrar San Esteban o ir a la misa del gallo".
La ultra Orriols ataca al Govern
Casualidad o no, el mensaje del fugado llega poco después de que la alcaldesa xenófoba de Ripoll, Sílvia Orriols (Aliança Catalana) criticara duramente al Govern por felicitar el "solsticio de invierno" y no las fiestas navideñas.
La primera edil extremista cargó contra los ciudadanos al afear que "hayan elegido a quienes niegan las leyes civiles y profesan valores antioccidentales".
Junts y Orriols pugnan por los votos
Precisamente, la munícipe extremista se juega parte de los votos del independentismo de derechas con Junts. Recientemente, un grupo de alcaldes neoconvergentes del Maresme pidió mano dura contra los inmigrantes multirreincidentes.
El movimiento se leyó como un intento de los secesionistas de cortar el paso a la política antiinmigracionista.
Turull avala la estrategia
A colación de ello, el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha avalado esta estrategia de apuntar a la inmigración para alzar un muro ante una eventual candidatura de Orriols a las elecciones autonómicas de Cataluña en 2025.
Previamente, Turull se había impuesto al sector de Laura Borràs, más obsesionado con las políticas independentistas que con el contenido ideológico.