El líder del PP en Cataluña, Alejandro Fernández, se mofa de que el ministro de Asuntos Exteriores de Letonia, Krisjani Karins, haya votado en contra de la oficialidad del catalán en la Unión Europea. "¿También es franquista este hombre?", ha ironizado.
Así se ha expresado el presidente de los populares después de que Karins haya avisado al ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, de que no va a "dedicar tiempo" en discutir sobre el reconocimiento del catalán, el euskera y el gallego como lenguas oficiales de la UE cuando hay otros asuntos de primer orden que los Veintisiete deben abordar con urgencia.
"No es el asunto número uno"
"No creo que vayamos a ampliar el número de lenguas que se usan de forma oficial en la Unión Europea", ha manifestado este martes el jefe de la diplomacia letona en declaraciones a su llegada a la reunión de ministros de la UE en Luxemburgo, al ser preguntado por la posición de su Gobierno sobre la petición española.
"No creo que ahora mismo sea el asunto número uno que necesitemos discutir, nuestro principal problema", ha continuado, para después avisar de que los 27 tienen "sobre la mesa muchos asuntos geopolíticos" y sobre la "posición estratégica" que el bloque debe asumir en el futuro. "Eso es en lo que debemos dedicar nuestro tiempo y centrarnos ahora mismo", ha espetado.
Una de las exigencias para la investidura
Cabe recordar que la oficialidad del catalán en las instituciones europeas es una de las condiciones que ponen los independentistas para dar su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez. Pese a que este martes se está abordando la cuestión por segunda vez, no está previsto que se tome ninguna decisión al respecto ya que España todavía no ha respondido a las dudas legales y financieras que sus socios exigen aclarar.
Mientras tanto, una veintena de organizaciones independentistas catalanas han enviado una carta conjunta a los Estados miembros para pedirles que voten sí a la oficialidad del catalán en la UE. Una iniciativa impulsada por Òmnium, los rectores de las ocho universidades públicas de Cataluña y los principales sindicatos y patronales de la región. Entre ellos, UGT, CCOO y Foment del Treball.