Querella contra dos mossos acusados de denuncia falsa y de mentir contra dos periodistas

La entidad Irídia ha presentado una querella contra dos mossos por, presuntamente, haber acusado falsamente a un fotoperiodista de lanzar una valla contra un agente en una manifestación y por "mentir" en un juicio contra un policía que agredió a otro profesional de la comunicación.

Así lo ha explicado esta mañana en una rueda de prensa la abogada de Irídia Sònia Olivella, acompañada presidente del Grup Barnils, Enric Borràs, entidad que apoya la querella junto con el denominado "observatorio" Media.cat, y que cuenta con el apoyo de la organización Free Press Unlimited.

Altercados del "Banco Expropiado" en 2016

Olivella y Borràs han explicado que los hechos denunciados se enmarcan en los altercados del año 2016 relativos al desalojo del autodenominado "Banco Expropiado", un centro social okupado en el barrio de Gràcia de Barcelona donde con anterioridad existía una oficina bancaria.

La cuarta noche de manifestaciones, en una carga, un agente antidisturbios de los Mossos d'Esquadra abandonó el cordón policial y supuestamente agredió con su porra al periodista Jesús Rodríguez, que cubría los hechos para el medio La Directa. Rodríguez fue diagnosticado en el hospital, tras del suceso, de una lesión en la pierna y una fractura en el dedo de la mano.

Un agente condenado con pena de cárcel

Los convocantes de la rueda de prensa han indicado que el policía, cuya versión fue contradicha en el juicio por siete periodistas más, fue condenado en 2021 a dos años de cárcel y a dos años de inhabilitación, a la suspensión de la actividad policial y a pagar una indemnización de más de 7.000 euros.

En los mismos disturbios, otro agente de los Mossos d'Esquadra sufrió una rotura en el tendón de Aquiles en la misma actuación policial, y un año y medio más tarde, en septiembre de 2017, el fotoperiodista Isidre Garcia Puntí fue acusado de lanzar una valla contra el policía y provocarle la lesión.

La sentencia firme del juicio contra Garcia celebrado en el juzgado penal 5 de Barcelona -y que se realizó con anterioridad al de Rodríguez por las lesiones que sufrió- le absolvió y afirmó que la valla "no fue lanzada directamente por nadie ni lanzada contra nadie".

Pese a lo dictado en la sentencia, el mismo policía que acusó a Garcia se reafirmó en los hechos cuando declaró en el juicio por las lesiones que había sufrido Jesús Rodríguez, donde volvió a insistir en que un fotoperiodista le había lanzado una valla y le había provocado lesiones.

En este segundo juicio también declaraba un sargento de la policía catalana, que apoyó la versión de Garcia, pese que había quedado descartada en la sentencia del periodista agredido.

Los impulsores de la querella han destacado que los dos agentes habían declarado bajo juramento o promesa de decir la verdad.

La versión de Irídia

Irídia, asociación que asegura dedicarse a la defensa de los derechos humanos y subvencionada por la Generalitat de Cataluña y otras administraciones públicas, ha subrayado que las grabaciones de periodistas en el desalojo del Banco Expropiado fueron determinantes para demostrar la inocencia de Isidre Garcia y para sacar adelante la acusación contra el agente que lesionó a Jesús Rodríguez, lo que refleja la importancia de la labor periodística en contextos de protesta.

Los impulsores de la querella han añadido que la actuación de los agentes, más allá de los delitos de los que les acusan, ha implicado la vulneración del derecho a la información, que debería garantizarse, especialmente en contextos de protesta.

Irídia y el resto de entidades afines han puesto en marcha la campaña "#ProuMentidesPolicials", con el objetivo de denunciar públicamente los hechos, que afirman que no son los únicos que se han podido haber producido contra profesionales de la información, y para ejemplificar obstáculos a los que supuestamente se enfrentan los periodistas.