Los sindicatos Ustec -mayoritario en el sector educativo en Cataluña-, Intersindical y CGT han hecho este martes un llamamiento a hacer huelga en las escuelas el próximo 6 de septiembre, día en que empiezan las clases de infantil, primaria y ESO en la autonomía.
Ustec ha convocado para mañana jueves una rueda de prensa ante el Parlament catalán para explicar las razones de su protesta, aunque ha avanzado, a grandes trazos, cuáles son algunas de sus reivindicaciones.
Reivindicaciones
El sindicato nacionalista sostiene que su protesta es "por la defensa de la escuela pública de calidad y en catalán" -en alusión a la inmersión monolingüe obligatoria en este idioma-; "por la defensa de los derechos de las personas trabajadoras de los centros educativos"; y para que la Consejería de Educación de la Generalitat, ahora encabezada por Anna simó, "inicie una etapa de diálogo y negociación con la parte social y escuche y se valore a los trabajadores" de los centros educativos.
Por todo ello, Ustec, junto a Intersindical y CGT, reclaman "no iniciar el curso con normalidad" si no se les atiende. Una amenaza con la cual tratan de presionar a Simó, con la cual tienen prevista una reunión este viernes.
La 'consellera' tiende la mano
La nueva consellera -en el cargo desde la destitución, hace dos semanas, de su antecesor Josep Gonzàlez-Cambray-, se comprometió en la sesión de control de la Cámara a trabajar para recuperar la normalidad en la relación del Govern con los sindicatos y la comunidad educativa.
Simó trazó un plan de trabajo para los dos próximos años en Educación, que según ella pasa también por "el diálogo" con ellos para evitar "confrontaciones" como las mantenidas con el sector en los últimos meses.
Presión sindical
Ya ayer martes, día en que empezó el pleno monográfico sobre Educación en el Parlament, decenas de representantes de los sindicatos de profesores USTEC, CGT, Intersindical y UGT se manifestaron a las puertas de la Cámara para exigir a Simó un cambio en la política educativa de la Generalitat.
Los manifestantes reclamaron una "negociación real para acabar con los recortes" que el colectivo padece desde 2010; un plan de estabilidad para el personal interino que supere los tres años de antigüedad y no pase los concursos de méritos y oposiciones; y fijar un calendario escolar "racional y consensuado".