La Junta Electoral Central (JEC) ha dejado sin escaño a Laura Borràs y ella ya tira de victimismo. La presidenta de Junts per Catalunya (JxCat) ha lamentado haberse enterado de "todas las informaciones judiciales por filtraciones a la prensa". "Iba a decir que ya no viene de aquí, pero sí que viene de aquí, porque hablamos de vulneración de derechos. Quien lo normaliza, colabora en ello", ha sentenciado a través de las redes sociales.
Cabe recordar que Borràs está condenada en primera instancia por prevaricación y falsedad documental por asignar 18 contratos fraccionados a dedo a un amigo cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC). Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que aun no es firme, ya que Borràs la ha recurriudo ante el Tribunal Supremo.
El Parlament se prepara
Eran poco más de las diez de la noche cuando la JEC dio a conocer su decisión sobre la condición de diputada a Borràs, a quien ha retirado su escaño tras desestimar las alegaciones de ésta y del Parlament en su defensa. Tal y como avanzó Abc, el organismo comunicará este jueves su decisión tanto a ella como a la Cámara, que deberá proceder a relevarla como diputada y como presidenta suspendida de la institución, tal y como habían reclamado PP, Vox y Ciudadanos.
La JEC cree que Borràs debe dejar su escaño para cumplir con la Ley Orgánica del Régimen Electoral Central (LOREG), que considera "inelegibles" a "los condenados por sentencia, aunque no sea firme, por delitos contra la Administración Pública", entre ellos el de prevaricación, que afecta a la presidenta de Junts. Esta legislación también señala que "las causas de inelegibilidad lo son también de incompatibilidad", por lo cual Borràs no puede presentarse a unas elecciones ni mantener su condición de diputada.
De este modo, Borràs deja de ser diputada y su puesto pasará a ser del veterano exdiputado Antoni Castellà, el siguiente de la lista de Junts per Catalunya.
Condenada por fraccionar contratos
El TSJC condenó a Laura Borràs a cuatro años y medio de cárcel y 13 de inhabilitación por fraccionar contratos cuando dirigía la ILC. La sentencia la condenó por los delitos de prevaricación y falsedad documental y el tribunal propuso un indulto parcial que rebaje la pena de prisión a no más de dos años, de manera que no tendría que entrar en la cárcel.
En una resolución publicada el pasado 13 de abril, la JEC ya dio el primer paso para retirarle el escaño, recordando el precedente del expresidente Quim Torra, que en 2021 también perdió el escaño al haber sido inhabilitado por una sentencia judicial. Sin embargo, el organismo concedió diez días a la Cámara autonómica para que informara de las decisiones y presentase alegaciones. Unas alegaciones que no han servido para que Borràs se mantenga en el escaño.
Puigdemont habla de "persecución"
Tras la decisión de la JEC, no solo ella ha tirado de victimismo. También su abogado, Gonzalo Boye, quien ha criticado que varios medios de comunicación hayan publicado la decisión antes de notificarla. "Veo que la JEC usa el mismo sistema de notificaciones que se ha usado en todo el proceso contra Laura Borràs... la prensa", ha ironizado en un mensaje en Twitter.
En la misma línea se ha pronunciado el expresidente fugado Carles Puigdemont: "Confirman la naturaleza política de la persecución a la presidenta Laura Borràs. No lo tenemos que normalizar; los que hoy se ríen por lo bajo, mañana serán víctimas", ha avisado.