Cazan a un tuitero estrella ‘indepe’ mientras vandalizan el Consejo Comarcal de l’Anoia

Un grupo de personas ha hecho unas pintadas críticas con el equipo dirigente del Consejo Comarcal de l'Anoia, en la localidad barcelonesa de Igualada. Una cámara de vigilancia ha captado en concreto a dos sujetos, que iban a cara descubierta y entre los que se identifica al politólogo Joan Mangues, residente en la ciudad y conocido en sus redes sociales por su activismo secesionista. Él, sin embargo, defiende que solo acompañó al autor material de los grafitis y se desvincula del ataque.

Las pintadas aparecidas en las inmediaciones de la sede del Consejo, presidido por Xavier Boquete (Junts per Catalunya), cuestionan el número de cargos --"1 presidente, 5 vicepresidentes, 33 consellers, 5 CCOO, 4 UGT"--, exigen "dimisiones" y cargan contra su vicepresidente, Jordi Cuadras, portavoz de Igualada Som-hi --formación integrada por PSC y los comuns-- en la oposición en el ayuntamiento, al que califican de "inepto".

Un edificio histórico

El Consejo se encuentra en un edificio histórico, por lo que su vandalización la contempla el artículo 323 del Código Penal con penas de prisión de seis meses a tres años o multa de 12 a 24 meses --o superiores, si los daños son de especial gravedad--. En concreto, el organismo se ubica en una construcción del siglo XVIII conocida como Casa Padró o Casa Serrals que adquirió y restauró el mismo Consejo Comarcal.

Por su parte, la sede del PSC del municipio --que se encuentra a 250 metros de la Casa Padró-- también ha recibido un mensaje con espray, realizado por la misma persona que el anterior, en el que se puede leer "¡Menos mal que sois el Govern alternativo!". Por estos hechos, los Mossos d'Esquadra han recibido sendas denuncias.

Problemas burocráticos

El Consejo Comarcal de l'Anoia ha sido noticia en los últimos días por los problemas surgidos con el pago de las nóminas a su personal --por un problema "burocrático" al coincidir la marcha voluntaria de su interventor y la baja médica de su secretario--, y finalmente resueltos.

Mangues, exmilitante de ERC, aclara que las pintadas de su compañero se deben a un descontento con la gestión de la institución, pero insiste en que él vio la vandalización desde la distancia y que su presencia era meramente de acompañamiento.