PSC-Units ha registrado una moción en el Parlament que incluye una batería de medidas para mejorar los recursos educativos y evitar la segregación escolar. En su propuesta, presentada por la diputada socialista Esther Niubó a modo de plan de choque, se insta al Govern a realizar un estudio del impacto social, educativo y económico del polémico avance del calendario escolar, garantizar la gratuidad de las guarderías y mejorar la atención a los niños con necesidades especiales.
De cara al nuevo curso escolar 2022-2023, los socialistas proponen trece medidas urgentes, tras constatar “el clima de malestar generalizado de la comunidad educativa”. Por un lado, recuperar los recursos docentes y de apoyo educativo de los centros con más complejidad, preservar el personal de atención educativa en el conjunto de las escuelas, incluidos los educadores sociales, e incrementar el personal docente y de apoyo donde ha aumentado esa complejidad.
Alumnos con necesidades especiales
En la moción también se incluye la presentación en la Comisión de Educación del Parlament antes de iniciar el próximo curso escolar “el modelo educativo inclusivo del Departamento de Educación, para mejorar la atención educativa al alumnado con NESE (necesidades especiales) desde la educación infantil de primer ciclo hasta la postobligatoria, aportando los recursos necesarios para garantizarla a través de una partida abierta o suficiente por refuerzo”.
“Transferir antes de finalizar el próximo curso escolar en los ayuntamientos titulares de guarderías municipios los recursos suficientes para ofrecer una atención adecuada a los niños en su diversidad” es otra de las medidas, junto a “un procedimiento de preinscripción único para los ciclos formativos de Grado Medio y Superior que no discrimine al alumnado proveniente del Bachillerato o de las escaleras de adultos, más transparente, y acompañado de una mejor oferta”.
PSC-Units incluye en su propuesta “permitir, en casos excepcionales y en aquellas zonas donde ha habido problemas a escolarizar en el proceso ordinario, incrementos de ratio, de líneas/grupos u otras medidas extraordinarias que permitan matricular alumnado en determinados centros”.
Asimismo, creen necesario modificar la normativa para establecer “unas condiciones o protocolo de cierre de centros de titularidad privada que impida su cierre inmediato y sin previo aviso, iniciado el proceso de preinscripción, y que permita sancionar la falta de responsabilidad social de las titularidades privadas de centros educativos que perjudiquen al alumnado y sus familias, y que afecten negativamente a las condiciones de escolarización de otros centros de la misma zona educativa”.
La hoja de ruta socialista en el ámbito educativo insta a acordar con el mundo municipal, antes de que acabe el próximo curso escolar, un “calendario de creación de plazas públicas de guardería en el territorio, para cubrir la creciente demanda existente, a corto plazo, y garantizar la universalización en el medio plazo”, sin la cual la gratuidad para los niños de dos años “no será posible para todos. En este sentido, proponen reconocer la aportación de los ayuntamientos para hacer posible esa gratuidad, “especialmente de aquellos que más tarificación social han aplicado”.
La moción del primer grupo de la oposición insta a impulsar durante el próximo curso escolar “un plan de mejora de las competencias orales y escritas en lengua inglesa (o una tercera lengua) del alumnado en la educación obligatoria el próximo curso escolar, incluyendo un incremento de dotaciones de profesorado especialista”.
El polémico avance del calendario
Respecto al polémico avance del calendario escolar, que ha desencadenado una serie de protestas y jornadas de huelga, PSC-Units proponen presentar antes del segundo trimestre del próximo curso, ante la Comisión de Educación del Parlament, “un estudio del impacto social, económico y educativo” de esa medida “vinculado a una reducción de la jornada lectiva durante el próximo mes de septiembre, que evalúe la equidad y la calidad educativa de la decisión tomada”.
Prever una formación expresa en los centros educativos sobre los nuevos currículums y su evaluación durante el primer trimestre del próximo curso, así como garantizar, antes del inicio del curso 2022-2023, los recursos económicos necesarios para activar un plan de choque que permita reforzar el sistema educativo, forman parte de las peticiones socialistas. También la presentación de un calendario de construcción, ampliación y mejora de los centros educativos pendientes de toda Cataluña, con las obligaciones presupuestarias correspondientes, incluyendo un plan para condicionar el conjunto de centros educativos y garantizar su eficiencia energética, e intensificar la ejecución de las obras previstas antes de fin de año.