Insultos, graves acusaciones infundadas y amenazas. Esa es la respuesta que recibe desde Junts per Catalunya (JxCat) el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la supuesta "normalización" que dice percibir en el clima político de esta autonomía. Esta vez, los improperios proceden de uno de los diputados de la formación posconvergente, Salvador Vergés, que no ha tenido reparos en llamar "represor" --entre otros improperios-- al dirigente socialista, al que acusa de robar, entre otros delitos.
"¿Normalizando la vida en Cataluña, represor? Nos robáis, nos encarceláis, nos prohibís derechos y lengua, nos atacáis, espiáis la intimidad de nuestras familias. Dentro de poco te comerás con patatas tu normalización. Y al final acabaréis vosotros en prisión. No os saldrá gratis", afirma Vergés en su perfil de Twitter, comentando así una noticia sobre la presunta distensión política que Pedro Sánchez dice percibir en Cataluña.
El diputado de JxCat, que percibe más de 60.000 euros anuales del Estado gracias a su cargo, se ha hecho célebre por su ultranacionalismo e hispanofobia. Tanto es así que en el Parlament, por ejemplo, alardea de votar en contra de cualquier iniciativa que se presente en lengua castellana.
“Vergüenza de llevar DNI español”
Exactivista de la ANC, Salvador Vergés logró su escaño en las autonómicas del año pasado, después de haberse hecho famoso por sus excentricidades, como por ejemplo retratarse ataviado como un ultra de los CDR, con la cara tapada con una bandera estelada, capucha y un fusil de juguete en la mano.
Del ardor hispanófobo de este dirigente dan cuenta afirmaciones como las que hizo en un discurso en Olot, ya en plena pandemia: “Nosotros somos diferentes, no tenemos nada que ver con esa gente. A muchos nos da vergüenza tener que seguir llevando el DNI español en nuestra cartera o bolso. Nosotros tenemos otra manera de hacer y de ser”. Además de eso, pidió el boicot a productos españoles y acusó al Estado de “robar 16.000 millones al año” en Cataluña y de tener "torturadores y represores".
La supuesta "represión" que dice sufrir Vergés no casa demasiado bien con su cargo ni con la imagen que exhibe en sus redes sociales, donde suele alardear de sus viajes, como por ejemplo uno que hizo el año pasado en velero por aguas del Mediterráneo.