El Gobierno de Pedro Sánchez ha apuntalado la red hotelera Golden Hotels & Experiences, perteneciente a la familia Aragonès, con una batería de hasta nueve créditos bancarios avalados por el Instituto de Crédito Oficial (ICO). El grupo ha recibido de la empresa pública préstamos por un importe total de 7,1 millones de euros.
Cinco empresas de Pere, Josep y Enric Aragonès Poch, padre y tíos del presidente de la Generalitat, solicitaron las facilidades crediticias entre 2020 y 2021. La primera entrega de dinero la recibieron el 3 de abril de 2020, cuando la parte más dura de las restricciones del coronavirus propició que se movilizaron recursos extraordinarios para compensar el cerrojazo de los negocios. Ese mismo mes y el siguiente ingresaron en caja otros cinco préstamos. El pasado marzo, cosecharon tres más.
Entidades
Las compañías beneficiarias de los fondos públicos son Montara, Bentar, Prohoteles Salou, Prohoteles y Residencial Port Salou. En los balances de 2020 aparecen reflejados los pasivos contraídos ese año. Sin embargo, se omite toda referencia a que se deben a auxilios del ICO estatal. Los portavoces de los empresarios hoteleros han declinado comentar los detalles contables y los créditos y otras líneas de financiación blanda que recibieron para capear la pandemia.
Las sociedades que mayor volumen de recursos oficiales percibieron son las tres últimas. Prohoteles Salou obtuvo dos millones, Prohoteles 1,9 y Residencial Port Salou, 1,4.
Sede en Pineda de Mar
El entramado empresarial de los Aragonès está formado por siete compañías. Todas ellas están radicadas en la sede central del grupo, sita en la calle Marconi de Pineda de Mar (Barcelona).
La red consta de siete alojamientos de playa en Cataluña. Incluye el Bahía de Tossa y el Mar Menuda, en la Costa Brava; el Taurus Aquapark Resort, en el litoral de Barcelona; más el Port Salou, el Donaire Beach, el Costa Salou y el Avenida Family Suites, en la Costa Daurada de Tarragona. En conjunto suman 1.930 habitaciones y 330 empleados.
ERTE y más ayudas
Los hospedajes estuvieron sujetos en 2020 a varios expedientes de regulación temporal debido al cierre forzoso y la ausencia de turistas. Gracias a los ERTE, las compañías de los Aragonès absorbieron ayudas del Departamento de Trabajo de la Generalitat, presidida por Pere Aragonès, por importe de 645.000 euros.
También recibieron 19 subvenciones de pequeña cuantía de la Agència Catalana de Turisme y del Consorci de Comerç i Artesania i Moda de Catalunya. Todas ellas suman tan solo 112.000 euros.
Hólding en Curazao
Pere, Josep y Enric Aragonès Poch mantuvieron ocultas a Hacienda sus empresas hoteleras durante muchas décadas. Ninguna de ellas figuraba a su nombre.
La dueña de todo el conglomerado era en última instancia una sociedad instrumental titulada Phedra Hotels Holding, domiciliada en la isla caribeña de Curazao, un reconocido paraíso fiscal perteneciente a las Antillas Holandesas. De hecho, según Oxfam Intermon, el enclave figura entre los 12 territorios off-shore más opacos del mundo.
Phedra estaba asentada en Curazao, pero la teledirigían desde Pineda de Mar los tres hermanos Aragonès.
Perdón tributario
En 2013, gracias a la amnistía fiscal de Mariano Rajoy, los Aragonès repatriaron Phedra y la inscribieron en el Registro Mercantil de Barcelona, tal como explicó Crónica Global.
Así, de golpe y porrazo, afloraron su montaje societario con un coste fiscal mínimo. Son incontables los impuestos que el linaje Aragonès escamoteó durante décadas a la Agencia Tributaria y a la Hacienda catalana.
Activos de 100 millones
Las siete empresas hoteleras de los Aragonès atesoran unos activos de 100 millones. La mayor parte de ellos corresponde al valor de los inmuebles que alojan los hoteles. El patrimonio (capital más reservas) estaba contabilizado en 44 millones en 2020, contra unas deudas bancarias de 28 millones.
Los ingresos de Golden cayeron en picado un 87% y se redujeron a 3,8 millones. Las pérdidas se dispararon hasta 10 millones.