El conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, ha dicho estar "satisfecho" porque el comité de huelga se siente a dialogar este martes en una reunión en la Conselleria de Treball. Asegura que él nunca "se ha levantado de la mesa", algo en lo que discrepan los sindicatos: "Una cosa es sentarse y otra es tener propuestas concretas". En una rueda de prensa tras el consell executiu, el titular de Educación ha mostrado su voluntad de "buscar un acuerdo" sobre las demandas de los docentes, siempre y cuando sean en beneficio de los alumnos. "Sus palabras son un insulto hacia la parte social. Debería traer propuestas, no venir a escuchar, porque ya saben lo que pedimos", dicen desde UGT en declaraciones a Crónica Global.
Sin embargo, Cambray insiste en que la medida de avanzar la vuelta a las aulas al 5 y al 7 de septiembre es "positiva", y que se trata de una decisión "para evolucionar en el sistema educativo catalán". De esta forma, se mantiene en su propuesta a pesar de que el pleno del Consell Escolar de este lunes aprobó un dictamen para aplazar el calendario. "Todas las propuestas de mejora son bien recibidas, pero no vemos justificada una moratoria cuando todos están de acuerdo en lo que hacemos", ha manifestado Cambray, quien ha defendido que en anteriores ocasiones el mismo órgano recomendó acortar las vacaciones de verano.
Cambray presume de soluciones
El conseller cree que "el cansancio" de los profesores se debe a los dos años de pandemia. A esto se le suma los recortes de hace más de diez años y que no se han revertido. Entiende su enfado, pero cree que él no es responsable de ello, al no estar al frente de la Consejería entonces. De hecho, ha asegurado que su gobierno está dando respuesta a algunas de las demandas: "El curso que viene tendremos menos alumnos y más profesores, más grupos y menos niños por aula. Empezaremos por Infantil 3 e iremos haciéndolo progresivamente". La intención es que, en nueve años, todas las escuelas estén en ratios de 20. "Hemos empezado a dar respuesta a estas demandas históricas de la comunidad educativa, pero no podemos hacerlo todo a la vez", ha añadido.
En cambio, estas palabras han cabreado todavía más a los sindicatos. Desde Ustec aseguran que, si el Govern no ha solucionado sus reivindicaciones, es por "falta de voluntad". "Sigue tirando adelante medidas sin consenso de la comunidad educativa". La prueba de ello es que ha enviado las instrucciones para el próximo curso a las direcciones horas antes de sentarse con el comité de huelga. En cuanto a las ratios, los docentes creen que el plan de Cambray es "insuficiente" porque debería hacerse en un plazo de cuatro o cinco años, "como mucho".
Los profesores vuelven a huelga
Desde UGT, Lorena Martínez lamenta que el consejero disfrace que todo va en relación al alumnado. "Es mentira", pues todos los recortes que se han hecho en educación "repercuten directamente en ellos". Por ejemplo, el decreto de inclusión de 2017 que no ha ido acompañado de un presupuesto económico ni de personal. "Tenemos al alumnado sin poderlo atender como se merece".
Mientras Cambray mantiene su postura, los sindicatos educativos trabajan en la huelga del 29 y 30 de marzo "contra su autoritarismo e imposición". "Como no nos escuchan vía diálogo, lo tendremos que hacer a golpe de huelga". La semana pasada "las calles de Barcelona y del resto del territorio se inundaron de gente cantando las demandas que llevamos pidiendo revertir desde hace más de diez años". Y lo seguirán haciendo hasta que el conseller ceda.