Quejas 'indepes' porque trabajadores de Nissan hablan castellano en TV3
Joan Puig, exdiputado de ERC y miembro de la mesa del Consell per la República de Puigdemont, exige a la televisión autonómica que sus intervenciones sean en catalán
2 diciembre, 2021 16:49En plenas movilizaciones de los trabajadores de Nissan para salvar sus puestos de trabajo ante el inminente cierre de la compañía en Cataluña, alguno de los referentes mediáticos del secesionismo se ha dedicado en las últimas horas a expresar su indignación por la lengua en la que hablan. Más en concreto, por el hecho de haber expresado sus reivindicaciones en TV3 en castellano.
Así ha ocurrido con Joan Puig, exdiputado de ERC y en la actualidad editor del digital larepublica.cat, además de dirigente del Consell per la República de Carles Puigdemont. Este destacado influencer ha criticado que la televisión autonómica haya dado en sus informaciones sobre las protestas de esta semana en la Zona Franca de Barcelona a trabajadores que se expresaban en castellano.
"Buenas noches, TV3. ¿No existen trabajadores de Nissan que hablen en catalán? Y lo más grave, ¿entre los representantes de los sindicatos?", se quejó Puig en su perfil de Twitter.
Camil Ros (UGT): "Hablé en catalán"
Pocos días antes de esto, el propio Puig había protagonizado una polémica similar por el hecho de que el secretario general de UGT, Camil Ros, apareciera en TV3 hablando en castellano. En este caso, en una información sobre las jornadas económicas de S'Agaró del pasado viernes, en las cuales participaron, entre otros, los dirigentes del Banco Central Europeo y del Banco Central de España Luis de Guidos y Hernández de Cos, respectivamente.
En esa ocasión, Ros le respondió lo siguiente en Twitter: "La atención a los medios la hice en catalán, y al final, preguntas en castellano, que fue de donde sale el corte en castellano en el Telenotícies". Una respuesta que Puig ha recuperado ahora para abundar en sus críticas a TV3, asegurando que le parecía "muy grave".
A pesar de la crisis laboral de las plantas catalanas de Nissan, cuyo cierre puede dar al traste con más decenas de miles de empleos directos e indirectos, no es la primera vez que, desde el secesionismo, se critica a sus trabajadores por no hablar catalán. Ya el pasado verano, la alcaldesa de Montcada, Laura Campos, denunció haber recibido insultos por parte de independentistas en sus redes sociales por el simple hecho de haberse dirigido a los trabajadores en castellano en una de sus protestas.
En días y semanas anteriores, entre el secesionismo ya habían proliferado críticas en redes sociales hacia la plantilla de Nissan por razones lingüísticas, ignorando de paso por completo sus reivindicaciones laborales. Fue tras la confirmación por parte del fabricante automotriz de que desmantelará sus tres plantas de Barcelona y la conurbación como parte de un plan global de restructuración. El movimiento dejará sin empleo a 3.000 personas de forma directa e impactará en otras 30.000 de forma indirecta.