Junts per Catalunya (JxCat) se siente víctima de una "guerra" por parte del Estado, una consigna cada vez más recurrente entre destacados dirigentes de este partido que gobierna la Generalitat junto a ERC. La formación posconvergente intensifica su discurso desafiante contra el Gobierno español y los partidos constitucionalistas. Reproches de los que tampoco se libran los comuns y su alcaldesa, Ada Colau, a quien recriminan que no haya ido a visitar al expresidente de la Generalitat fugado de la justicia Carles Puigdemont a su residencia en Bélgica.
Así lo han expresado este sábado cuatro mandatarios de JxCat con altos cargos institucionales --Laura Borràs, Elsa Artadi, Míriam Nogueras y Francesc de Dalmases-- en un mítin en el barrio barcelonés del Clot, de claro cariz preelectoral, y caracterizado por el tono áspero, bronco y crispado de sus oradores.
La presidenta del Parlament carga contra la oposición
Así, por ejemplo, Borràs, presidenta del Parlament catalán, ha acusado al mismo Estado al cual le debe el cargo de estar en "guerra abierta" contra el secesionismo y lo que, según ella, "representa la fuerza de la ciudadanía expresada en las urnas masivamente elección tras elección".
La máxima representante de la Cámara catalana ha aprovechado la ocasión para cargar contra la oposición no nacionalista. Más en concreto, contra Ciudadanos (Cs), partido al que acusa de "torpedear" en el Parlament el trámite de los Presupuestos de la Generalitat propuestos por el Govern de ERC y JxCat: "Vivimos un acoso", ha espetado. Por este hecho, la mandataria posconvergente considera que Cs desea convertir la Cámara "en un plató de televisión" y de querer "degradar" las instituciones catalanas.
"Querellas en un desplegable"
Borràs, asimismo, ha sostenido que hay partidos que "presumen" de lo que denomina "judicialización de la política, de esta denuncia permanente y de entorpecer los procesos parlamentarios más básicos".
La dirigente secesionista --a la espera de un juicio por el presunto fraccionamiento de contratos públicos a un amigo en 2014-- ha ironizado además sobre su situación personal, y ha afirmado que acumula "querellas en un desplegable". A su modo de ver, su "compromiso" y el de su partido es proteger las instituciones y garantizar la democracia.
"Nos lloverán las denuncias y querellas que sean necesarias, pero nosotros no dejaremos de hacer lo que es necesario hacer para recordar este proceso de erosión permanente de la democracia", ha sostenido.
Artadi, contra Colau
Por su parte, la concejal de JxCat en el Ayuntamiento de Barcelona, Elsa Artadi, ha iniciado su discurso agradeciéndole a Borràs haber devuelto "la dignidad" a la Cámara catalana y que los representantes secesionistas en la Mesa del Parlament velen, en su opinión, por su soberanía.
Artadi, cuyo partido quedó quinto en las pasadas elecciones municipales, ha redoblado sus críticas contra la alcaldesa Ada Colau, a la que ha reprochado que no haya ido a ver a Puigdemont a Bélgica, y de no ir a apoyar a otros exmandatarios de la Generalitat fugados en el extranjero: "¿Cuántas veces habéis visto a Colau en Bruselas o en Ginebra visitando el exilio?", ha dicho.
"Sólo se preocupa de Madrid"
En su encendido discurso nacionalista, la concejal posconvergente también ha acusado a la alcaldesa de falta de liderazgo y de no colaborar con otros ediles de JxCat, como con la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas: "Sólo está en Madrid, sólo se preocupa de Madrid y de su proyección personal", ha manifestado.
Artadi, asimismo, ha acusado a PP, Cs y Vox de tumbar iniciativas que ella considera progresistas y sociales, y de conformar "una minoría que ha decidido esconderse bajo las faldas de una justicia de ultraderecha".
Loas a Puigdemont
La diputada de JxCat en el Parlamento español Míriam Nogueras, por su parte, ha utilizado el caso de la suspensión Oriol Junqueras (ERC), Josep Rull, Jordi Turull y Jordi Sánchez (JxCat) como diputados en 2019 --en aquel momento, en prisión provisional por el procés, y a la espera de sus sentencias en el Tribunal Supremo-- para cargar contra la presidenta del Congreso, Meritxell Batet (PSC). Algo que ha aprovechado para ensalzar a Borràs. Según ella, mientras ésta se dedica a "proteger" los derechos y libertades de los diputados del Parlament, Batet se dedica a "echarlos fuera".
Por su parte, De Dalmases ha lamentado que la ciudadanía de Barcelona reconozca, según él, "la lucha y la fuerza del exilio, mientras que el Gobierno de la ciudad lo ignora". Y ha expresado su apoyo a Puigdemont y al resto de exmandatarios de la Generalitat fugados en el extranjero.