Ver la viga en el ojo ajeno. Esta es la actitud que, según el líder de PSC-Units, Salvador Illa, mantiene el Govern sobre el uso del catalán en el sector audiovisual. El socialista ha reprochado al presidente, Pere Aragonès, el incumplimiento de las previsiones que, al respecto, hace la ley catalana del cine aprobada en 2010. Lo ha hecho en referencia a las exigencias de ERC y Junts per Catalunya (JxCat) sobre la inclusión de cuota de catalán en las plataformas de pago en la ley audiovisual española, asunto que se ha convertido en eje de la negociación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Illa se ha interesado por el desarrollo de la ley catalana del cine en la sesión de control celebrada en el Parlament. “Tal como denuncia la Plataforma per la Llengua, no se ha llegado al 3% de doblaje al catalán (se preveía un 25%) y se ha reducido el presupuesto para el sector audiovisual. Tendrá mi apoyo siempre en el ejercicio del autogobierno dentro del ejercicio de sus competencias, pero cumpla con las leyes de este Parlament”, ha dicho el socialista, quien ha vuelto a tender la mano al Ejecutivo independentista.
Relación con las 'majors'
“Trabajamos en la financiación del doblaje en catalán, que debe estar disponible en las distribuidoras, pero también en las plataformas. Pero la relación con las majors (grandes productoras americanas) que puede tener un Estado no es la misma que la que pueda tener Cataluña, que todavía no es Estado”. Josep Maria Jové (ERC) también se ha referido a la situación del catalán. “Una república catalana blindaría el catalán, pero hoy es imprescindible defenderlo, también en un sistema de cuotas en la ley audiovisual y a través del Plan Nacional por la Lengua aprobado por el Parlament.
El president ha dicho que proteger el catalán es un compromiso de su Govern: “Trabajamos en la ley audiovisual catalana, el Plan Nacional y negociamos con el Gobierno por esas cuotas. Trabajamos para mejorar el uso del catalán en la administración de Justicia, y reforzaremos la lengua catalana como vehicular". Sin embargo, ha precisado que "las alertas se deben poner al lado de los activos”: “Somos 10 millones de catalanohablantes, es la lengua cooficial que tiene más uso en internet. Tiene una producción cultural de primer nivel”.
Déficit fiscal
Por su parte, Albert Batet (JxCat) ha denunciado la asfixia financiera de Cataluña debido “al déficit fiscal y la falta de ejecución” de los Presupuestos del Estado. “El independentismo debe aprovechar para exigir más recursos. Por ello proponemos la creación de la comisión sobre la deuda histórica del Estado con Cataluña en el Parlament", ha dicho Batet
Aragonès ha cifrado ese déficit en un 8% sobre el PIB catalán. "La pregunta es qué debemos hacer. El mejor presupuesto que tendremos no es el de la Generalitat de 2022 ni el del Estado, sino los de un Estado independiente. Pero de momento debemos aprovechar los instrumentos que tenemos. Próximamente se reunirá la comisión mixta de infraestructuras y el Govern estará representado por el vicepresidente (JxCat)”.
También sobre presupuestos ha versado la intevención de Jessica Albiach (En Comú Podem), quien ha pedido detalles de las cuentas de la Generalitat para 2022 porque “definirán las políticas del futuro”.
El presidente catalán ha dicho que los presupuestos “son importantes, pero también para qué”: “En mi investidura dije que estaban destinados a una transformación social, el fortalecimiento de los servicios públicos en clave feminista, y una transformación verde y democrática, para solucionar el conflicto catalán". Ha recordado que tendió la mano a los comunes, pero no lo logró. “Presentaremos los presupuestos el 9 de noviembre en el Consell Executiu”, y confía en su aprobación en el Parlament gracias a los votos de JxCat, ERC y CUP.
Las exigencias de la CUP
Dolors Sabater (CUP) ha calificado de “tomadura de pelo” la negociación de los Presupuestos del Estado con el PSOE "a pesar de la falta de ejecución de las partidas, sin tener traspaso de Rodalies y sin derecho a la autodeterminación".
Aragonès ha dicho que no es el Govern el que negocia en el Congreso por lo que ha pedido respeto para las decisiones de los grupos. “Esto es una sesión de control al presidente, no a los 13 diputados de ERC que, por cierto, ganó las elecciones generales de 2019 en Cataluña. Confiamos en contar con su apoyo para lograr la amnistía y la autodeterminación”, ha respondido.
Y precisamente sobre la CUP y su empeño en fiscalizar la labor de los Mossos ha tratado la pregunta de Carlos Carrizosa (Ciudadanos), quien se ha referido al “servilismo” del Govern hacia los antisistema "denunciado por los sindicatos de los Mossos d’Esquadra. El mismo día que se vota una comisión para investigar cómo se gestionó la pandemia en las residencias impulsada por Cs y En Comú Podem, se crea otra para fiscalizar la labor de los Mossos, que se quejan de ser moneda de cambio”, ha dicho Carrizosa.
Aragonès ha negado que los Mossos sean moneda de cambio. “Le pido que deje de utilizar a los Mossos de forma partidista. Los Mossos y la policía local necesitan un incremento de efectivos, no solo los 400 agentes recién diplomados, sino los 700 que se incorporan este curso. Pediremos en los Presupuestos del Estado que los Mossos puedan jubilarse a los 59, como sí pueden Policía Nacional y Ertzaintza".