Las súplicas de la CUP para que Junts per Catalunya (JxCat) apoye la investidura de Pere Aragonès y formar, con ello, otro Govern independentista en Cataluña han caído, de momento, en saco roto. Y desde las propias filas posconvergentes se encargan de recordarles por qué. Tal ha sido el caso de su diputado Joan Canadell, dejándole claro a la exdiputada cupaire Mireia Boya que en JxCat "no se sienten de izquierdas". Una afirmación que, por razones desconocidas, matizó una hora después.
Boya se sumó desde sus redes sociales a las peticiones que se han hecho desde la CUP para que los herederos de la antigua Convergència apoyen al nuevo gobierno de la Generalitat, pidiéndoles un cambio en sus planteamientos económicos: "Ojalá ERC no ceda en los temas sociales (de mínimos y urgentes) acordados con la CUP. Junts tiene que asumir que este país ha virado a la izquierda y que los votantes no quieren que la emergencia socioeconómica, ecológica y democrática sea gestionada como hasta ahora. Hace falta un cambio", afirmó la exdiputada de la CUP --partido que en su día propició, con su abstención, las investiduras de Carles Puigdemont y Quim Torra-- en su perfil de Twitter.
Su comentario fue rebatido con contundencia por Canadell, expresidente de la Cámara de Comercio de Barcelona y número 3 de JxCat en las pasadas elecciones autonómicas del 14F, que se encargó de recordarle que los 32 diputados posconvergentes en el Parlament "no se sienten" de izquierdas: "Mireia, si para hacer un gobierno hacen falta 32 diputados que no se sienten de izquierdas, no es democrático exigir que hagamos un gobierno de izquierdas", apuntó el empresario de gasolineras de autoservicio, reivindicando acto seguido sus postulados económicos: "Vaya por delante que soy el primero que querría ayudar a todo el mundo, pero hacen falta prioridades, también ayudar al sector económico de las pimes para generar más riqueza y bienestar", dijo.
Canadell puntualizó su comentario apenas una hora después, cuando sus palabras ya habían adquirido cierto revuelo --y también jolgorio, en no pocos casos-- en las redes sociales: "Dejadme matizar que no 'todos' los diputados de Junts son de izquierdas", manifestó.